Roberto Colombo tenía 24 años, y en la madrugada del domingo, decidió caminar las 15 cuadras que separan la casa de su padre de la de su madre, en la localidad escobarense de Garín. En ese trayecto, y sin que aún se conozcan demasiados detalles, fue asesinado de tres tiros. El hecho ocurrió en la intersección de Francia y Gabriela Mistral, y fue alertado por los vecinos con un llamado al 911, cuando escucharon los disparos.
La principal hipótesis que maneja hoy la policía es que habrían querido robarle y, frente a un intento por defenderse, lo mataron. Esto se deduce de que en el lugar del asesinato encontraron un cuchillo ensangrentado, que sería de la joven víctima, y con el que habría logrado herir a uno de sus agresores.
Los disparos fueron en la zona del tórax y el abdómen, pero las pertenencias de Colombo estaban junto al cuerpo: una mochila con su notebook y el celular, además de algo de ropa y poco dinero en efectivo.
Luego de lo acontecido, el comisario de la localidad de Garín, Walter Manrique, fue desplazado de su cargo, según lo indicaron fuentes del municipio, que pidieron "el relevamiento del titular de la Comisaría 3° de Garín, al mismo tiempo que se exigió al Ministerio que acelere la instalación del subcomando policial en los terrenos adquiridos por el municipio para tal fin y cercanos al lugar donde ocurrió el trágico hecho". En su lugar, quedó Eduardo Donadío, quien era hasta hace pocas horas titular de la comisaría de la localidad de Maquinista Savio.
Este miércoles 25 de julio, familiares, amigos y vecinos de Roberto marcharán desde el reloj del boulevard de Garín para pedir justicia por el crimen. Será desde las 17 horas, y convocan a llevar prendas negras, fotos del joven y carteles que digan "Justicia por Roberto Colombo".