Luego de conocerse la noticia de que 26 trabajadores fueron despedidos de la planta de FarmFrites en Vicente López, organizaciones sindicales y partidos políticos se solidarizaron con la situación. Uno de ellos, fue el Sindicato de Trabajadores Municipales de Vicente López, encabezado por Victorio Pirillo.
"Ante los 450 trabajadores que perdieron el trabajo en Bangho en el distrito, los 350 de Atanor, sumado a los 650 de Pepsico y a un número importante de PyMEs que han cerrado, y que rondan los 30 en Vicente López, estos nuevos despidos constituyen un genocidio laboral", sentenció Pirillo, quien expresó su acompañamiento ante la situación.
En ese sentido, manifestó que "se trata de un número inmenso de familias que quedaron sin su sustento digno de vida, que es su fuente de trabajo, su salario, y el poder llevar con orgullo un sueldo obtenido en la mejor de las leyes". Además, dijo que la situación en FarmFrites "no hace más que engrosar la gran masa de desocupados y excluidos que está teniendo el país en estos últimos años".
"Hago un llamado a las autoridades para que se revea el carácter humanitario de esta situación. No nos podemos quedar con que la gente pierde su empleo y se terminó. Los empresarios tienen como defenderse y cuentan con herramientas como el acceso al crédito y al mercado", afirmó Pirillo, y en esta línea, señaló que "a muchos trabajadores, más aún si se trata de personas con muchos años en el rubro como en este caso, el sistema los descarta".
Por último, sostuvo que a esto, se agrega "una situación de prejuzgamiento por parte de los empleadores, cuando un trabajador busca reubicarse, porque vienen de una serie de situaciones que toman estado público y que son motivos de exposición por los conflictos que han tenido".