24 de marzo: la casa de Oesterheld

Ubicada en Rivadavia 1985, a metros de la estación de Beccar del tren Mitre, el lugar configura uno de los espacios históricos que tiene la zona norte y que recuerdan los crímenes y desapariciones perpetrados durante la última dictadura cívico - militar.

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Uno de los lugares emblemáticos de la zona norte que recuerda el 24 de marzo, el Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia, es sin dudas la casa donde vivió Héctor Oesterheld, creador de El Eternauta. Ese chalet esquinero de tonalidades amarillas y recubierto de verde, cerquita de las vías de la estación Beccar, fue donde él y su pareja, Elsa Sánchez, vivieron durante décadas y criaron a sus cuatro hijas: Marina, Estela, Beatriz y Diana.

Pero además, la casa de los Oesterheld en Rivadavia 1985, no sólo inspiró la célebre historieta que significó dos años de entregas semanales en 365 páginas, sino que se convirtió en un espacio inevitable para la efervescencia juvenil de la época.

“Era de madrugada, apenas las tres. No había ninguna luz en las casas de la vecindad: la ventana de mi cuarto era la única iluminada. Hacía frío, pero a veces me gusta trabajar con la ventana abierta: mirar las estrellas descansa…”, así comienza El Eternauta, haciendo referencia a un chalecito suburbano de clase media, habitado por Juan Salvo, el narrador, junto a su esposa Elena y a su hija Marta, que duermen mientras en el altillo éste y sus amigos juegan al truco.

Oesterheld, junto a sus hijas, que realizaban tareas sociales en barrios vulnerables de la localidad de Beccar, fueron secuestrados y desaparecidos por la última dictadura cívico - militar.

El escritor y dibujante pasó a la clandestinidad, desde donde finalizó el guión de El Eternauta, y el 27 de abril de 1977 fue secuestrado por las fuerzas armadas en La Plata, que habían ya desaparecido y asesinado sus cuatro hijas. También desaparecieron y asesinaron sus yernos y nietos.

Estuvo detenido en los centros clandestinos El Vesubio y El Sheraton. No se conocen a ciencia cierta las circunstancias ni la fecha precisa de la muerte de Oesterheld, aunque se supone que tuvo lugar en 1978.

La Fiscalía de Núremberg, Alemania, investigó también su secuestro y desaparición forzada en la Argentina. En tanto que su esposa, Elsa Sánchez, era una Abuela de Plaza de Mayo y falleció en 2015 con la esperanza de que su historia, como la de tantos otros, no quedará en el olvido.