El Museo Casa Sarmiento es uno de los espacios más emblemáticos de Tigre. Días atrás, se celebraron sus 90 años y, en pocas palabras, es menester recordar algo de su historia.
Desde su primera visita en 1855, Domingo Faustino Sarmiento quedó cautivado por la belleza del Delta y quiso contar con una casa de descanso para disfrutar de la tranquilidad de las islas junto a su familia y amigos. Federico Álvarez de Toledo, dueño de la isla en Tigre donde hoy se encuentra el Museo, regaló a su amigo la propiedad en 1860, cuando supo que él quería tener una casa en la zona del Delta del Paraná.
“Prócida” fue el nombre que Sarmiento le dio a la vivienda, basándose en la pequeña isla que se encuentra frente a la ciudad italiana de Nápoles, en el sur de Italia, y construyó dentro de su isla un puente al que bautizó igual al de la ciudad de Venecia, “Rialto”.
Una pequeña construcción de madera con techo de tejas, con esa simpleza podría describirse su morada. Según los historiadores de la casa, entre los que se encuentran María del Carmen Magaz y María Beatriz Arévalo, la planta baja era libre, mientras que la planta alta era donde se encontraba la única habitación que posee la casa. Las paredes, construidas con tablas prefabricadas, muestran de que se trata de una arquitectura mucho más elaborada de lo que pueda imaginarse a simple vista.
Allí, Sarmiento no sólo se dedicó a descansar y a escribir, sino que durante sus más de 30 años de estadía, ofició de consejero en el armado de otras casas y en la solución de problemas habituales que la vida del Delta tenía por esos años.
Tras su muerte, las 30 hectáreas de su propiedad y la casa se convirtieron en terrenos fiscales y en 1893 las compró el Dr. Delcasse, quien en 1915 donó la hectárea conocida como “la isla Sarmiento” a la Asociación Protectora de Niños, Pájaros y Plantas y al Liceo Nacional de Señoritas para la construcción de una escuela. En octubre de 1928, la casa fue restaurada por el Consejo Nacional de Educación, que la declaró Museo Casa Sarmiento.
Cuatro años más tarde, el Club de Empleados del Consejo Escolar se hizo cargo del predio. La escuela fue demolida y se construyó un recreo para los socios, que mantuvo su auge durante varias décadas. Con el correr del tiempo, la casa sufrió un atentado e incendio y permaneció abandonada hasta 1996. Ese año, el Ministerio de Educación cedió en guarda el predio completo al municipio de Tigre, que hizo la última restauración y levantó el templete vidriado para su protección. La reinauguración oficial de la Casa Museo Sarmiento fue el 11 de septiembre de 1997.
Actualmente, la Casa Museo Sarmiento es una casa de madera, restaurada y protegida por una cúpula de cristal. Una plaza pública la vincula con el Centro Cultural y Biblioteca Municipal Paula Albarracín, donde funciona la Orquesta Infantil -Juvenil de Música Popular del Delta y talleres gratuitos de capacitación artística, un espacio en el que los vecinos cuentan con salas de exposición temporaria para artistas isleños y del continente.
Las visitas a la casa del prócer, ubicada precisamente en Río Sarmiento y Arroyo Los Reyes, pueden realizarse de miércoles a domingo, de 10 a 18 horas, y el recorrido deberá hacerse mediante un guía, con el que podrá consultarse la disponibilidad para la visita al teléfono 5282-7603.
La celebración de su 90° aniversario
La jornada de celebración comenzó por la tarde, con shows musicales, entre los que se encontró el espectáculo "de la casa", con la presentación de la Orquesta Infantil Juvenil del Delta. Durante el evento, los presentes también pudieron ver un video sobre los detalles del museo desde sus inicios, a la vez que disfrutaron de la nueva museografía en la casona, que cuenta con espacios donde se explica la historia del lugar y de Sarmiento.
"Estamos muy contentos de poder brindar a los vecinos una nueva museografía, para que entiendan qué hizo Sarmiento por este Tigre, por la isla. Él fue un visionario, y eso es lo que mostramos en este museo", expresó la subsecretaria de Cultura, Milagros Noblía Galán.
Lucía Navarro, descendiente directa de Domingo Faustino Sarmiento, concluyó: "Es muy emocionante estar en este evento y ver todo lo que han trabajado, cómo han refaccionado la casa. Ha sido un evento lindísimo, muy acogedor, han podido transmitir lo más íntimo de Sarmiento".
