Malena Galmarini, presidenta de Aguas y Saneamientos Argentinos S.A. (AySA), analizó el desarrollo de la gestión de la empresa estatal en el marco de la pandemia por coronavirus, y afirmó que "a AySA le faltaba una mirada social". También, pensando en la situación económica, resaltó que la empresa pondrá en marcha casi 200 obras, que generaran "30 mil puestos de trabajo directos e indirectos".
"El agua es un servicio esencial siempre, pero en medio de una pandemia más todavía. Por eso desde el inicio de esta gestión y más allá de que el coronavirus llegó a Argentina, empezamos a trabajar para garantizar ese servicio, tanto el de agua potable como el de cloacas", manifestó en una entrevista con el programa de QUE PASA por FM Fénix.
En relación a los ejes del trabajo de la empresa, explicó: "Tenemos alrededor de 12 millones de usuarios y usuarias que tienen red y más de 2 millones que aún no tienen la red en su casa, por lo tanto tenemos dos rangos de acción. Uno que es mantener el servicio, la calidad del agua y del tratamiento de los líquidos cloacales y por eso estamos reforzando la proporción de químicos que se les ponen al agua. Por otra parte, estamos evaluando cómo hacemos para llegar a aquellos vecinos y vecinas de conurbano bonaerense que no tienen red, son los que más nos preocupan, los más vulnerables".
En este sentido, destacó que "en principio pensamos en la gente de islas en Tigre y San Fernando. Tenemos cinco recorridos por la primera sección en la semana y además, por otro lado, va a hasta San Fernando a atender a los vecinos que están un poco más lejos, en la segunda sección. Se llevan cisternas y se para en todos los muelles para cargarles agua a nuestros vecinos isleños y que no tengan que acercarse al continente. También se trabaja en conjunto con PAMI para que cuando cuenten con las vacunas antigripales puedan venir a acompañarnos e ir vacunando a los adultos mayores del Delta, que son el grupo que corre más riesgo."
“Las obras no son caños que se entierran, son mayor y mejor calidad de vida”
Para quienes están en continente pero no cuentan con el servicio de red, dijo, "se trabaja codo a codo con los municipios: se llevan camiones cisternas con agua y hace un tiempo también estamos envasando agua en bidones de 10 y 5 litros, algo que para AySA es muy difícil y para lo que tuvimos que readecuar la planta Juan Manuel de Rosas en Tigre".
En cuanto a las medidas de prevención tomadas por la empresa, explicó que "cambiamos las guardias, mandamos a sus casas a quienes eran grupo de riesgo o tenían licencias por cuidado, y utilizamos todos los métodos que el Ministerio de Salud de la Nación y la Organización Mundial de la Salud ponen como prioritarios: lavarse las manos, alcohol en gel, los barbijos si fuera necesario, la distancia social, no toser ni estornudar cerca de otro y en el pliegue del codo."
"Hoy estamos hablando del coronavirus, pero lavarnos las manos, tomar agua segura, hacer los alimentos con agua segura, o limpiar nuestras casas habla todos los días de la prevención en salud. No solamente el coronavirus se mata con agua y jabón, la influenza que nos da la gripe, la bronquiolitis, o la gastroenterocolitis también con agua y jabón desaparecen", dijo.
"Es una situación excepcional, porque hace ya un mes que estamos todo el día en casa y esto también sobrecarga el sistema de aguas y cloacas, sobrecarga la necesidad de atención de reclamos en el menor tiempo posible y ahí estamos todos, toda la empresa, cuidando a los que hay que cuidar y los que no somos parte de los grupos de riesgo al pie del cañón trabajando para todos los que están en sus casas.
Por otra parte, Galmarini definió la impronta con la que encabeza la gestión desde su profesión de politóloga, y sostuvo que "lo que se necesitaba no era un ingeniero más, sino alguien que pudiera llevar adelante la administración de la empresa con una mirada menos técnica y más de servicio a la comunidad".
"Nos gobernó durante cuatro años un ingeniero y así nos dejó el país. No es lo más adecuado estar comparando si lo que conviene es un ingeniero o una politóloga. Creo que lo que mandan son los resultados, y cuando nosotros llegamos había 93 obras paradas. Hoy no sólo tenemos esas obras en ejecución, sino que estamos poniendo en marcha otras 187, con casi 30 mil puestos de trabajo directos e indirectos, y una necesidad presupuestaria de 35 mil millones de pesos sólo para este año. Cada vez que se termine una obra, va a comenzar otra. Para este año estamos calculando un millón y medio de beneficiarios más. Eso es lo importante, no tanto la profesión de cada uno sino cuáles sean los resultados y si hay algo que creo que le faltaba a esta empresa era una mirada más social. Las obras no son caños que enterramos o veredas que se rompen y volvemos a reparar, son mayor y mejor calidad de vida para nuestros vecinos y vecinas", detalló.
“Los vecinos que no tienen red de agua son los que más nos preocupan y los más vulnerables”
Por último, expresó su agradecimiento a trabajadores, cooperativas, empresas contratistas y municipios, porque "en este momento de pandemia para que muchos puedan quedarse en sus casa, algunos tenemos que correr el riesgo y salir a trabajar y ponerle el cuerpo".
"El coronavirus puso de relieve cuáles son las desigualdades, dónde están y eso nos da la oportunidad para pelear por una mejor Argentina y por qué no por un mejor planeta", concluyó.