El Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) convalidó la decisión de que Edenor deberá utilizar el menor registro de los tres últimos años para emitir la factura durante la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus a usuarios residenciales. A su vez, ordenó que facture el consumo real a pequeñas y medianas empresas e industrias, según informó el organismo.
En el caso de los usuarios residenciales, el ENRE instruyó a que se realice la estimación del consumo de usuarios residenciales utilizando el menor registro de consumo correspondiente al mismo periodo de estimación de los últimos tres años, y modificar la fórmula, en la actual coyuntura en que no se puede tomar registro presencial de los medidores.
La nueva fórmula de estimación tendrá vigencia hasta que se normalicen las tareas de lectura de medidores, limitadas en la actualidad por la vigencia del aislamiento obligatorio.
Por otra parte, el ENRE estableció que "las pymes e industrias que hayan recibido facturas con consumos estimados, con diferencias respecto al consumo real, podrán impugnar la facturación ante la empresa distribuidora, la cual deberá refacturar en base a la demanda real presentada por los usuarios y usuarias”.
En este sentido, el organismo recordó que instruyó a las distribuidoras a reforzar los canales de atención al cliente para garantizar los derechos de los usuarios del servicio, con la premisa de permitir que puedan impugnar sus facturas en los casos donde se detecte un desvío entre el consumo real y el estimado por la distribuidora, declarando el valor consumido.
Además, se “habilitó la lectura de medidores para usuarios T2 y T3, con el aval del Ministerio de Desarrollo Productivo”.
En relación a las mediciones que venía llevando adelante la empresa, mediante un comunicado el presidente de la Confederación Económica de la Provincia de Buenos Aires (Cepba), Guillermo Siro, expresó: “Vamos a hacer una presentación ante los organismos regulatorios para que estas facturas inexactas y abusivas no sean cobradas o que se suspenda el cobro hasta que puedan controlarlo o que cobren el consumo real”.
Por último, señaló que, “debido a que no mandan gente a controlar los medidores, están utilizando las facturas y los valores en los sectores productivos, industriales y también domiciliarios de los meses en los que había actividad sin tomar en cuenta que desde marzo, el 70% de comercios y fábricas no ha tenido actividad ni consumo”.
