Matu: "Si la política no la pensamos los trabajadores, la terminan pensando los empresarios como Massa, Macri o Scioli"

En una entrevista con el candidato a diputado provincial del Frente de Izquierda, Rubén Matu, nos contó sobre su participación en la política desde la perspectiva de un trabajador que vivió en carne propia la precarización laboral, su visión del conurbano bonaerense, la figura de Nicolás Del Caño como candidato a presidente y sobre las expectativas para las elecciones del domingo.

Rubén Matu tiene 34 años y es delegado de Lear y actual candidato a diputado provincial por el FIT. Vive en Malvinas Argentinas y se distingue del resto de los políticos por su acento del conurbano y su experiencia obrera. Aspira a ocupar una banca en el Congreso, pero reconoce que la lucha se da en la calle acompañando los reclamos de los trabajadores.

 

-¿Cuándo comenzó tu faceta política como militante?

-Comencé a militar en 2009, después del conflicto de Kraft (ex Terrabusi), trabajaba en línea de producción en Lear y al ver las condiciones de trabajo en las que operábamos, los ritmos, los casos de despidos constantes, sentí la necesidad de involucrarme. Luego de la crisis de 2008 en Estados Unidos acá arranca con los despidos de contratados y luego con los efectivos. Siempre los trabajadores pagamos los platos rotos con despidos, suspensiones o aumento del ritmo de producción. Si bien con le kirchnerismo se generaron fuentes de trabajo, la situación precarización y explotación se profundizó. A partir de ahí me involucré de una manera más decidida, nos empezamos a juntar afuera de la fábrica, ya venía integrando del PTS. Además tuve la influencia de la izquierda desde mi casa, mi papá militaba en el MAS en los ´80, era delegado de la Courtney y recuerdo marchas, movilizaciones y piquetes. Pero no sólo por lo que pasaba en la fábrica empecé a militar, también fue realizando actividades, solidarizándome con diferentes trabajadores, viajando para conocer otras experiencias laborales, con lo que sucedió con Mariano Ferreyra, me sentí muy identificado.

-¿En qué momento decidiste postularte como diputado provincial?

-Por toda la experiencia que fui adquiriendo y en el 2011 sobretodo cuando ingresé como delegado de Lear, por el hecho de pelear por mejores condiciones de trabajo y mejores salarios, por no dejar el cuerpo en la fábrica, por todos los reclamos de los trabajadores dentro del establecimiento, vi que tenía todo un límite.

-¿Crees que desde el Congreso se puede modificar la situación de los trabajadores?

-Creo que es una herramienta para fortalecer la pelea que uno da, y sirve como tribuna para denunciar las injusticias que viven los trabajadores a diario. Estar en la legislatura puede aportar a la lucha porque uno puede impulsar proyectos de ley, mostrando que hoy en el recinto es donde se legisla y se administra los negocios de los grandes capitales trasnacionales y no se legisla por los intereses de las mayorías. La izquierda tiene que estar ahí para dar cuenta de otra realidad, la de los trabajadores.

-¿Cómo ves el estado actual del conurbano bonaerense?

 -He recorrido muchos barrios y hablado con distintos trabajadores. Uno lo ve también desde el lugar donde vive, en Malvinas Argentinas las calles siguen igual desde cuando era pibe, lo único que se hicieron fueron countries, las escuelas donde estudié se encuentran en peores condiciones. En Tigre estuvimos la semana pasada con Nicolás Del Caño y Gabriela Macauda hablando con los docentes y nos decían que en muchos casos son los propios docentes quienes compran las tizas y los borradores, a ese punto llega la situación de abandono. La mayoría de mis amigos viven con los padres todavía o alquilan, no se pueden comprar una casa propia, el tema de la vivienda para los trabajadores es determinante.

-¿Y en Tigre qué pasa?

 -Gran parte del cordón industrial del país arranca en General paz y termina en Tigre, las fábricas multinacionales están en Tigre. Recuerdo que en 2009 cuando fue el conflicto de Kraft, Sergio Massa estaba pidiendo por favor que desalojen, estuvo a favor de la represión y apoyando a la embajada norteamericana. Durante el conflicto con Lear, si bien los que nos reprimieron fueron otros, la policía bonaerense a cargo de Daniel Scioli y la gendarmería nacional, Massa nunca se pronunció a favor de la reincorporación de los trabajadores, y además el COT perseguía a nuestros compañeros. Después lo que uno ve es que en Tigre la contradicción de clase se expresa más fuerte, donde hay zonas muy turísticas y countries donde habitan el 5% de la población en muchas hectáreas y el resto de la población hacinados sin cloacas, ni viviendas.

-La izquierda dice representar a los trabajadores que involucra a gran parte del electorado, ¿por qué crees que no alcanzan una adhesión mayor en cuanto a sus reclamos?

 -A los trabajadores se nos trata de arrancar parte de la historia, después del golpe militar se aniquila la vanguardia de trabajadores combativos, quedando muy pocas experiencias vivas. Luego el neoliberalismo lo profundiza mucho más.  A los trabajadores se nos trata de arrancar la historia, nos dicen que no se puede vivir mejor, nuestra única perspectiva de la realidad es trabajar en la fábrica 9 horas. Nos dicen que las ideas que proclama la izquierda son antigua y utópicas, que es una locura porque los capitales se ven a ir del país y no vamos a tener trabajo, yo proclamo que se vayan todos los empresarios. Porque lo trabajadores, que somos los que producimos las riquezas, tenemos que vivir en las condiciones que vivimos.Por ejemplo, Sergio Szpolski quiere ser intendente de Tigre y es un empresario, y como tal no va a salir a denunciar lo que pasa con los trabajadores en los barrios como Las Tunas, porque sus interese son otros. No obstante, estamos teniendo un crecimiento mayor en el electorado, Nicolás Del Caño se asentó como figura, vemos que un sector importante se empieza a identificar con los reclamos del Frente de Izquierda.

-¿Qué características tiene Nicolás Del Caño que lo distingue del resto de los candidatos presidenciales?

-Nicolás trasmite mucha empatía, habla como uno. Es uno de los pocos políticos que puede hablar de la precarización, de la situación de los docentes, de diferentes temas porque se rodea de trabajadores. Nicolás llega a sectores que la izquierda nunca pudo llegar, Jorge Altamira se quedaba más en un círculo intelectual. Nicolás está presente en cada lucha y movilización, poniendo el cuerpo. También influye el sentimiento de recambio generacional que no sólo se vio en la izquierda sino también en el resto de los partidos.

-¿Cuáles son las expectativas para este domingo?

-Creemos que el resultado va a ser positivo, ya con el hecho de poder transmitir nuestras ideas masivamente, que la gente se puede identificar es un logro muy importante. Los cargos que se puedan conseguir van a servir para fortalecer la lucha, no son un fin en sí mismo. Nuestra participación en los medios también ayudó a dar a conocer la visión que tenemos, siempre con la idea de que las candidaturas obreras ayuden a que los trabajadores puedan entenderse como sujetos políticos, porque si la política no la pensamos los trabajadores, la terminan pensando los empresarios como Massa, Macri o Scioli.