El Matador enfrenta a Racing el domingo a las 18.15 en Victoria con el arbitraje de Fernando Espinoza.
Por: Iván Plouchuk
Después de unas semanas muy intensas por la lucha para meterse en la pre Libertadores, el equipo de Alfaro llega al cierre del Torneo casi sin chances de meterse. Aunque por un lado es una decepción ya que a lo largo del año Tigre ha jugado muy bien y se merecía una chance por meterse en la máxima competición sudamericana, también hay que reconocer que se clasificó con mucha tranquilidad a la pre Sudamericana y que llega con posibilidades matemáticas, lo que no es poco para un plantel que hace no tanto estaba peleando por mantener la categoría.
Es por eso que con la tranquilidad de saber que el objetivo está casi cumplido, es importante que este domingo se aproveche para relajar y disfrutar de lo que será sin dudas una fiesta para el hincha Matador. En parte porque habrá que agradecer un gran año, a pesar de algunas manchas como la rápida eliminación de la Sudamericana, en el que Tigre volvió a ser protagonista. Y también porque después vendrán un par de partidos claves para redondear el año de la mejor manera con una nueva clasificación a esa tan deseada y trunca Copa. Es momento de recuperar a los que llegaron justos después de un semestre con triple competencia, de darle la chance a algunos que no tuvieron tantos minutos, y de jugar con la tranquilidad de saber que se ha mejorado mucho, pero con el compromiso de darle una alegría a la gente que sin duda se acercará de forma multitudinaria al Coliseo.