El presidente Alberto Fernández anunció este viernes cómo será la nueva etapa del aislamiento social, preventivo y obligatorio que entrará en vigor el próximo lunes 17. El discurso se realizó desde la Residencia de Olivos, y el primer mandatario estuvo acompañado por el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y por el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Luego de destacar la producción de la vacuna que se desarrollará en el país y señalar que esto marca "un nuevo tiempo" y que "deja ver un horizonte", entre los anuncios de este mediodía se definió la prolongación de las medidas actuales hasta el próximo 30 de agosto, con la única excepción que se permitirán los deportes individuales en la Ciudad de Buenos Aires, aunque sin confirmación aún de si se podrán realizar en la Provincia.
"Hay que acotar lo máximo posible la circulación y el encuentro de las personas, la cercanía. No estamos en condiciones de sentirnos con capacidad de con quién uno se encuentra o no, porque ello conlleva un riesgo", manifestó Fernández, apelando a la responsabilidad individual, y al respeto del distanciamiento social.
Haciendo referencia al bajo acatamiento que han tenido en las últimas etapas algunas medidas tomadas por el gobierno nacional, el mandatario señaló que "la cuarentena en Argentina ya no existe" y enfatizó: "Seguimos hablando de cuarentena sin que en la Argentina exista cuarentena porque la gente circula, porque los negocios se han abierto y la actividad industrial ya está funcionando por encima del 90%".
En ese sentido, pidió "máxima prudencia" y dijo que "está en nuestras manos cuidarnos, ya no depende de un presidente o de un gobernador. Estamos en un tiempo donde los ciudadanos no se sienten libre por no poder encontrarse con sus afectos. Nosotros sólo podemos decirles que en esos encuentros el riesgo de contagio se potencia enormemente".
"Estamos muy lejos de tener el tema resuelto", expresó y dijo que la vacuna podría estar a principios del año que viene "pero para eso faltan 4 meses", por eso "tenemos que potenciar el cuidado".
Por su parte, Kicillof destacó que "nos toca tomar esta definición en un momento excepcional", debido a la producción de la vacuna en Argentina y manifestó que "es un cambio absoluto".
"Al saber que esto tiene fecha de vencimiento, los esfuerzos y los sacrificios se justifican muchísimo más y se pueden hacer. Encontramos el hilo para salir del laberinto, pero es un alivio a futuro, nos permite planificar, pero hasta que no tengamos la vacuna la única forma de cuidarse es una muy primitiva: no podemos estar juntos y hacer lo que hacíamos antes. Es el único remedio que tenemos para no contagiarnos", enfatizó el gobernador y dijo que "no podemos relajarnos, y hay que estar más atentos que nunca".