El sobrino del Papa Francisco fue secuestrado ayer cerca de a las 11 de la mañana, luego de que dos ladrones lo sorprendieran cuando manejaba su auto por San Fernando.
José Ignacio Bergoglio, de 32 años, había salido de la casa de su novia en la calle Uruguay, a pocos metros del Camino del Buen Ayre, cuando los delincuentes lo amenazaron con un arma de fuego y se subieron al auto y obligaron al familiar del Papa a manejar por la autopista.
Los delincuentes le sacaron unos 4 mil pesos en efectivo y los documentos, pero cuando vieron que se acercaban a un retén policial, decidieron tirarse del automóvil en movimiento y huir corriendo hacia una villa, a la altura de José León Suárez.
Los policias advirtieron la maniobra e intuyeron que sucedía algo raro, por lo que asistieron a Bergoglio, quien dijo que se encontraba bien y no presentaba signos de haber sido golpeado. El casos en encuentra en manos del fiscal de turno. La Policía Bonaerense realizó un cordón policial en la zona donde se bajaron los ladrones, al momento con resultado negativo.