Tras el episodio de violencia que vivió la vicedirectora de la escuela 503 de San Fernando, al ser golpeada fuertemente por el padre de una alumna, los docentes marcharon desde la mañana para pedir por mayor seguridad. El agresor, Gustavo Garay, continúa prófugo.
Por Sofia Gnädinger
En la mañana de hoy alrededor de 200 docentes realizaron una movilización solicitando a las autoridades escolares del Distrito que se hicieran cargo de la situación de la vicedirectora agredida, Cinzia Pellegrini, exigiendo mayor seguridad y prevención en las escuelas.
''El agresor tiene un prontuario en su legajo donde viene agrediendo sistemáticamente a todos los docentes y directivos de las instituciones por las que pasó su hija. La culpa de lo que le ocurrió a Cinzia es de las autoridades porque nadie hizo nada en cinco años de denuncias y advertencias. Los decentes estamos totalmente desprotegidos'', afirmó la docente y psicóloga de la escuela, Fabiana Ábila.
Por su parte, la conducción de los docentes de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) consideró que la agresión física a Cinzia Pellegrini "es el episodio de violencia contra docentes más grave registrado en la Provincia".
La caravana de docentes partió a las 10 de la plaza Mitre, recorriendo las calles del centro sanfernandino, la puerta de la escuela 503, la jefatura, el hospital y la Secretaría de Infancia, Adolescencia y Familia.
El incidente tuvo lugar el martes al mediodía en la Escuela 503 de la localidad de San Fernando. Cinzia Pellegrini se encontraba en el establecimiento mientras los alumnos estaban en el comedor. Al momento de culminar la jornada, el padre de una de las alumnas, Gustavo Garay, preguntó por las autoridades, ocasión en que se presentó la vicedirectora.
Sin mediar palabra, la mujer recibió un golpe en la cara que además la desestabilizó y provocó su caída, hecho que fue aprovechado por el hombre que comenzó a patearla fuertemente en la cabeza. Tras la intervención de otros maestros, el agresor se retiró de la escuela amenazando con volver.
Luego de media hora de espera de la ambulancia, Cinzia fue llevada al hospital de San Fernando Petrona V. Cordero, donde le hicieron una placa pero no había un médico que la asistiera. Los compañeros docentes afirman que hubo negligencia al no atenderla inmediatamente.
En la comisaría Primera de San Fernando se radicó la denuncia. Allí Cinzia que apenas podía caminar, vomitó y se desvaneció, la policía llamó a una ambulancia del hospital, pero los familiares se negaron luego del trato que había recibido y decidieron trasladarla a una clínica privada en el partido de San Isidro.
La educadora debió ser intervenida quirúrgicamente y los médicos informaron que sufrió un coágulo y lesiones en el hueso occipital, aunque se encuentra internada con "pronóstico favorable".
''Estuvimos acompañando a Cinzia desde el primer momento, recién ahora los inspectores y las autoridades educativas se acercaron. Es un momento de inflexión para revisar lo que sucede con las tres instituciones encargadas: seguridad, salud y educación'', afirmó la docente Fabiana Ábila.
''Lo que reclamamos es que no hubo reacción alguna frente a las denuncias previas. Es la prevención lo que importa porque esto se podría haberse evitado '', señaló el profesor de educación física, Mariano Álgaba.
Los docentes de la escuela 503 acordaron no presentarse a trabajar hasta que el agresor se encuentre detenido. Según explicaron en la entidad gremial (FEB), Gustavo Garay se fugó con su mujer y su hija, "tiene pedido de captura dispuesto por la Fiscalía de turno, a cargo de Facundo Osores Soler".
A ese establecimiento con nivel inicial, primario y secundario asisten diariamente unos 70 chicos con trastornos emocionales severos, retrasos madurativos y déficit visual. Tiene diversos proyectos de huerta y música que integran a la comunidad y a los padres, además de realizarse trabajos de atención a niños con necesidades corporales y psicomotrices.
