Las obras hidráulicas municipales que llevan adelante San Fernando y San Isidro en la avenida Uruguay, límite entre las dos ciudades, se tratan de una serie de rejas del tipo ‘guardaganado’ para filtrar agua de lluvia directamente hacia el conducto del arroyo Pavón, previamente desobstruido, y lograr así que cesen anegamientos e inundaciones.
Días atrás, fue instalada sobre la calle la tercera de estas estructuras, que se suma a más de 500 metros de desagüe. Aún faltan concluir unos 300 metros para evitar anegamientos en el barrio Crisol y parte de Beccar.