Tigre lo empató en la agonía del partido en Victoria y se llevó un punto ante Central Córdoba. El equipo fue dominador del juego en un principio pero se topó con un gol sorpresivo al final de la primera etapa que lo tuvo abajo por todo el complemento, y mermó el rendimiento. Mateo Retegui puso el 1 a 1 final casi sobre la hora.
Un primer tiempo muy entretenido se produjo en la soleada tarde de Victoria. Tigre fue el claro dominador de los hilos del encuentro pero, como reza esa histórica frase relacionada a la redonda, por 'esas cosas que tiene el fútbol', Central Córdoba, sin hacer demasiado, se puso en ventaja en una jugada totalmente aislada y que encontró mal parado al equipo de Martínez.
La primera etapa fue de menor a mayor. Tigre, obligado a hacer valer su localía en su regreso a lo más alto, salió decidido. Aunque en principio sus acercamientos eran solo insinuaciones: primero con un cabezazo de Magnín, previo centro de Protti, y luego con un disparo cruzado de Castro que pasó cerca del arco defendido por Toselli.
Por el lado del equipo santiagueño, apenas un remate defectuoso del zaguero central Pereyra, tras un tiro de esquina desde el sector derecho, que en dos tiempos contuvo Marinelli.
A partir de allí el Matador comenzó a inclinar la cancha y a hacer notar las deficiencias defensivas del cuadro dirigido por el Huevo Rondina. A los 34 minutos Zabala tomó el balón, encaró al área rival, se sacó dos hombres de encima y abrió a la izquierda con Magnín, quien remató y provocó la salvada milagrosa de Toselli, que arrojándose con su brazo diestro desvió la pelota al tiro de esquina.
Pero la más clara de Tigre fue a los 39', momento en que, después de un error en la salida de Central Córdoba, Protti contuvo la pelota, asistió a Magnín, que solito frente al arco increíblemente tiró el balón por encima del horizontal. El mismo Magnín quedó nuevamente en la puerta del gol dos minutos después, cuando tras centro de Protti enganchó la pelota y se topó con Toselli, a esa altura una de las figuras de la tarde.
Y cuando parecía que el primer tiempo se moría con el cero para ambos, en una jugada aislada el visitante llegó al gol a través de su atacante López, que ante poca posibilidad de pase ensayó un disparo que se coló a la derecha de Marinelli: 1 a 0 y final de la primera etapa.
Para el complemento Tigre perdió esa intensidad del primer tiempo que lo había llevado a estar cerca del gol. Castro con un tiro por arriba del travesaño y un cabezazo de Magnín, fue de lo más claro del local en los primeros 25 minutos, que incluso sufrió un poco más los avances de Central Córdoba. En ese aspecto Marinelli tomó un rol protagónico importante salvando a su equipo del segundo gol en algunas ocasiones.
Martínez mandó a la cancha a Colidio (por Salomón) y encontró en él una mayor frescura en el ataque. De hecho pocos minutos después de ingresar tuvo el empate a través de un disparo que contuvo el seguro Toselli arrojándose a su costado derecho.
Y cuando el partido se moría, tras un tiro libre, el ingresado Retegui enganchó el balón y desató el delirio en Victoria. Tigre lo empató y, por como se dio el partido, fue lo más justo, sobre todo por lo realizado en la primera etapa.
El próximo partido será ante Barracas Central el próximo lunes 21 de febrero.