El clásico de zona norte quedó para Tigre, y por mucho. El Matador venció a Platense jugando un gran futbol y los de Claudio Spontón no pudieron desplegar nada su juego. Fue 4 a 0, con goles de Pablo Magnín en dos ocasiones, Facundo Colidio y Lucas Blondel. De esta manera, el equipo de Victoria se ubica por el momento en el segundo lugar de la Zona 2, a sólo un punto de Estudiantes, que lidera.
En el arranque del partido, Tigre tomó el protagonismo y empezó a ser el más claro con la pelota en los pies. Mucho movimiento de afuera hacia adentro de Cristian Zabala y Alexis Castro, quienes jugaron nuevamente "sueltos" delante de Sebastián Prédiger y Equi Fernández. Platense todavía no se había acomodado y a los 10' llegó el primer gol del partido: Magnín la bajó para Zabala, el 27 rompió hacia adentro en velocidad, abrió para Sebastián Prieto y el lateral tiró el centro para que Colidio conecte casi de palomita al primer palo de Jorge De Olivera.
Primer gol la casaca de Tigre para el ex Inter, que jugó de titular por la molestia muscular que sufrió Ijiel Protti. En el cabezazo, Kevin Andrade lo golpeó con el codo y por eso quedó sentido en el piso unos minutos. Tigre se adueñó del trámite y Platense se volvió muy "Schor dependiente", como ya había ocurrido en otros encuentros ante la falta de profundidad crónica que sufre. Sus pocos ataques fueron por izquierda y bien contenidos por el Matador. Los laterales se proyectaron poco y la pelota nunca le llegaba limpia a Gonzalo Bergessio. A los 21', una clara de Tigre otra vez por intermedio de Colidio, que conectó de volea un rebote que dio De Olivera y la pelota se fue por arriba del travesaño.
Al Calamar le costó mucho la salida y perdía muy rápido la pelota en los intentos por jugar en largo o buscar en corto a algún volante central. El Matador se encontró con el segundo a los 32'. Recuperación en campo propio, Colidio salió disparado en velocidad, Iván Gómez no lo pudo bajar, abrió para Castro y Pucho, inteligente, enganchó y Nicolás Morgantini lo taló. Penal que Magnín cambió por gol pateando cruzado. Segundo grito en el campeonato para el 7.
El Calamar sintió el golpe y se fue definitivamente del partido. Solo un minuto después, Lucas Blondel marcó el tercero después de recibir solo por derecha (muy buena habilitación de Castro, tomándose un tiempo más para buscar el hombre libre) y picarla con gran categoría ante la salida de De Olivera. Tigre manejó todos los aspectos del partido en los primeros 45' y se fue al descanso con absoluta tranquilidad por el resultado. El Marrón no pateó al arco.
En el complemento nada cambió y Tigre siguió siendo ampliamente superior a Platense. A los 3', Magnín casi clava el cuarto después de un jugadón del Matador que salió tocando desde el fondo. De Olivera achicó bien y le ahogó el grito cuando le pegaba de media vuelta. Sorpresivamente, el Calamar nunca pudo corregir sus errores y llegaba tarde a todas las pelotas, además de que el arco de Gonzalo Marinelli le quedaba cada vez más lejos. Franco Baldassarra tuvo un partido muy flojo al igual que Hernán Lamberti y Andrade en defensa, a quien le ganaron la espalda y lo desbordaron toda la noche.
A los 10', Magnín liquidó el encuentro. Otra conducción en velocidad con cancha libre de Castro, pared con Colidio, Andrade despejó pero la pelota dio en un compañero y le quedó a Magnín, que no estaba en fuera de juego. Atajó De Olivera y en el rebote sacudió de derecha para marcar su doblete. El línea había levantado la bandera pero el árbitro Yael Falcón Pérez convalidó de manera correcta el tanto.
El resto del partido casi que estuvo de más, Tigre siguió floreándose y el Calamar ya padecía el partido. Intentaba hilvanar alguna secuencia de pases y cuando quería darse cuenta ya estaba retrocediendo para defender.
El Matador desplegó todo su juego y dejó en evidencia nuevamente que la idea del técnico está trabajada a la perfección y que los jugadores se adaptan a todos los roles que el DT pide. Zabala y Colidio jugaron un verdadero partidazo, Magnín volvió intratable en el área y el resto, tanto los volantes centrales como los defensores, acompañó de gran forma la labor forma.
Con este resultado, el Matador llegó a 12 unidades y se ubicó en el segundo puesto, a solo un punto del líder Estudiantes. Por su parte, el Calamar encadenó su cuarta derrota consecutiva, quedó noveno en la Zona A con 7 puntos y no encuentra el rumbo.
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