Tigre le ganó a Huracán en Victoria y se subió a la punta del torneo. Sufrió, jugó con 10 todo el segundo tiempo, pero demostró actitud y se transformó en puntero. Fue 2 a 1, para el festejo de todo Victoria, la alegría de sus hinchas y la esperanza de seguir en puestos para clasificar a cuartos.
El Matador arrancó con el pie sobre el acelerador y al minuto de juego tuvo una chance clara de gol: arranque de Colidio que abrió para Prieto por la izquierda, centro que Magnín conectó de taco para habilitar a Colidio, que remató al cuerpo de Marcos Díaz que le ahogó el grito de gol en el área chica. Los primeros minutos fueron de mucha intensidad en el mediocampo y a los 10' llegó el 1-0 de Tigre: Protti se filtró entre la defensa de Huracán, Díaz lo derribó de forma clara en el área y Magnín, con la categoría de siempre, cambió penal por gol.
Quinto gol en el campeonato para el delantero, que se lo gritó en la cara a Marcos Díaz y recibió la tarjeta amarilla. Después del gol, Tigre retrocedió y se compactó bien durante todo el primer tiempo. En ataque, Protti fue peligroso con y sin pelota y nunca lo pudieron detectar ni marcar correctamente. Los laterales, tanto Blondel como Prieto, volvieron a demostrar su importancia en el esquema de Martínez.
A los 22', justamente Prieto tuvo una clara con un zurdazo desde lejos que después de desviarse pegó en el travesaño. El Matador, al igual que contra Independiente, buscó juntar gente por un lado para buscar el hombre libre en el costado opuesto con algún cambio de frente, aunque en algunos pasajes de la primera parte fue dominado por el visitante.
En un partido de ida y vuelta, el Globo presionó y también tuvo un par de situaciones claras: dos remates en el palo y en el travesaño. Además, el Matador, por el lado de Blondel, sufrió los desbordes de Cabral.
A pesar de eso, en una de las últimas de la primera parte Prédiger se las ingenió para conectar un centro de Zabala y marcar lo que hubiese sido el 2-0. El línea Castany levantó la bandera, el VAR le dio la derecha al asistente y el gol fue invalidado. Por si faltaba algo, Equi Fernández, quien ya cargaba con una amarilla por una falta "táctica" y había tenido un primer tiempo impreciso la pelota, se fue expulsado en el último segundo por tirarle un pelotazo a un jugador de Huracán cuando ya estaba detenido el juego.
Con 10 jugadores, los de Victoria arrancaron la segunda parte un poco más replegados y buscando el juego directo, contra un Huracán más posicional, recuperando rápido e intentando generar en campo rival. Tal es así, que a los 9 minutos Cóccaro tuvo una clara que tapó bien Gonzalo Marinelli.
Antes de los 20, Diego Martínez ya había movido las fichas para intentar darle solidez al equipo ante la situación de desventaja numérica dentro del campo: Facundo Colidio salió por el central Oscar Salomón, Cristian Zabala le dejó su lugar a Agustín Baldi, y el goleador Pablo Magnín se sentó en el banco para el ingreso de Alexis Castro.
Durante todo el segundo tiempo llovieron los centros en el área del arquero del Matador, y Huracán ganó por arriba en varias ocasiones. A los 39 minutos los de Parque Patricios no pudieron empujarla tras una serie de rebotes en el área chica, y fue otra clara para los del Kudelka.
Inmediatamente después, luego de una recuperación de Prédiger en el medio y centro de Castro, Gonzalo Flores, otro de los ingresados en la segunda mitad, quedó sólo para definir de zurda y poner el 2 a 0.
Cuando el partido se moría, Cordero marcó la diferencia y selló el 2 a 1 final. Al dominio de Huracán le faltó definición y Tigre fue contundente, por eso volvió a sumar de a tres para quedar en lo más alto del torneo, jugando todo el segundo tiempo con uno menos.
El próximo partido de Tigre será ni más ni menos que contra Estudiantes en la ciudad de La Plata, otro de los que viene arriba en la Zona B. El duelo se jugará el martes 19 de abril a las 19 horas.
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