Nuevamente los Bomberos Voluntarios de San Isidro se colocaron la capa de héroes y se llevan todos los aplausos. Esta vez no les tocó combatir con las llamas de algún edificio o casa, ni tampoco salvarle la vida a un bebé de seis meses o a una abuela de 80, como sí lo han hecho en tantas ocasiones. Su tarea fue algo distinta: rescatar a un caballo.
El particular operativo se dio en horas de la madrugada del último martes en el ex predio de Aguas Argentinas, situado en Tomkinson e Intendente Becco, donde los servidores públicos se dirigieron luego de ser alertados de que un caballo había caído adentro de los piletones.
“Recuperarlo fue complejo. Tomó varias horas de trabajo y lo logramos”, manifestaron desde el cuerpo a través de su cuenta de Instagram. Es que cuando consiguieron rescatar al animal, éste presentaba un principio de hipotermia. Sin embargo, afortunadamente, lograron que recupere calor y pueda movilizarse por sus propios medios.
El operativo no tuvo las características ni el contexto que nos tienen acostumbrados los Bomberos Voluntarios de San Isidro. De lo que sí estamos acostumbrados es a relatar el extraordinario accionar de los hombres y mujeres que componen el cuerpo.