Engranajes: un espacio de arte, educación y contención en Boulogne

El centro comunitario se encuentra en el Bajo de Boulogne y lleva una década desarrollando actividades y talleres para niños, jóvenes y adultos. Combina el arte con la educación popular y la formación laboral. En esta nota te contamos un poco acerca de su historia y la incidencia en el barrio.

A pocas cuadras de la autopista panamericana se encuentra el Centro Comunitario Engranajes, una asociación civil creada en 2007 en la avenida Bernardo de Irigoyen 2431, localidad de Boulogne del Partido de San Isidro.

Se trata de un centro cultural donde el arte, la educación y el trabajo son los pilares que motororizan el trabajo de una veintena de voluntarios que asisten de lunes a sábados para ofrecer talleres a niños, jóvenes y adultos. Semanalmente transitan por el centro unos 150 chicos ya sea participando de alguna actividad o simplemente como un espacio de contención.

Olga González es la presidenta y directora de la institución que comenzó como parte de proyecto de la Fundación “Crear Vale la Pena” y hace diez años logró emplazarse en Boulogne. “El centro se compone y autogestiona con el aporte de los vecinos. Nuestra impronta siempre estuvo trazada por el arte y la transformación social”, señaló.

En el centro se dictan distintos talleres de forma gratuita de lunes a viernes de 14 a 21 y los sábado de 15 a 20. Las actividades van desde percusión, teclado, batería, guitarra, ensamble, danzas urbanas, folklore, literatura, dibujo, escritura, hasta un curso de Liderazgo Social para los adolescentes de 13 a 18 años. Entre los tópicos que se trabajan en las clases se encuentra la violencia, la baja de imputabilidad, salud y educación sexual. “Son temas que atraviesan su vida cotidiana y buscamos ponerlo en discusión”, comentó Olga.

También se dictan clases de apoyo escolar y funciona el Programa Fines de terminalidad educativa, donde concurren unas 30 personas. Asimismo, todos los días a partir de las 18 se ofrece un refuerzo de merienda.

Acerca del trabajo comunitario y la autogestión, la presidenta de la institución explicó que fueron aprendiendo sobre la marcha. “No fue fácil porque todo lo hacemos a pulmón. Somos el único centro de estas características en la zona y no solo trabajamos con vecinos del barrio sino también se acercan chicos del barrio San Isidro, Villa Hidalgo, Santa Ana, entre otros”.

Actualmente el Centro Cultural Engranajes participa de la Red del Bajo Boulogne y del Consejo Local de Niñez.

Otro de los ejes que puntualiza la institución es la formación laboral, en los últimos años comenzaron un taller destinado a jóvenes de 18 a 29 años, que busca brindarles herramientas para conseguir empleo, desde la construcción de un perfil, descubrir habilidades y buscar convenios laborales con empresas.

Una de las problemáticas más frecuentes de las instituciones comunitarias es el modo de financiamiento, a propósito González explicó que reciben pequeños aportes del Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia y de organizaciones como el Rotary Club y empresas de la zona.

"Engranajes es un lugar hecho por la gente del barrio, para el barrio y con el barrio".

En los últimos años lograron conformar grupos de percusión y ballet de folklore que comenzaron a exhibirse en peñas y barrios a los que eran invitados. Según indicó la directora de la institución, muchos chicos que tomaban clases ahora son los profesores.

Jesica Bruno es coordinadora y detalló lo que significa la institución para el barrio: “Una de las cosas que me deja este proyecto es poder mostrar al otro que todo se puede, no importa si no tenés. Se puede salir de la calle, de la droga, es un espacio de contención. Engranajes es un lugar hecho por la gente del barrio, para el barrio y con el barrio”.

En el mes de noviembre el Centro Cultural cumplirá 10 años y realizarán actividades todos los meses que culminarán con un gran festival para toda la comunidad.

Sobre los diez años transitados, González concluyó emocionada: “Personalmente siento que fui creciendo al lado de la institución. Antes era una simple mamá y este centro me llevó terminar la secundaria y hacer una carrera, sentía que necesitaba herramientas para poder seguir, pero lo que más enorgullece es ver el cambio de los chicos día a día. Engranajes significa preocuparse por el otro y eso es lo que intentamos transmitir”.