El caso de Ramón Oviedo conmocionó a la localidad de Boulogne, en el partido de San Isidro, donde murió este hombre que cumplía 30 años el pasado 18 de marzo, mismo día que fue asesinado.
Esa tarde, alrededor de las 17 horas, y según declaraciones de vecinos de la zona, "entró a una casa en la esquina de las calles Ipiranga y Gascón" y aseguran que "no tenía intenciones de lastimar a nadie, estaba alterado y delirando".
Los dueños de la casa dicen que "alrededor de diez efectivos se lo llevaron en una camioneta policial" y esa fue la última vez que fue visto con vida. Momentos después, los médicos del Hospital de Boulogne lo vieron "golpeado y muerto" en la puerta de la comisaría. Allegados sostienen que "los policías le pegaron salvajemente en la puerta de la seccional".
Por este motivo, el viernes 28 de abril a las 17 horas, familiares y amigos de Ramón y los vecinos de Boulogne, se juntarán en la esquina de Sarratea y Avenida Rolón para marchar y reclamar por el hecho.