Sergio Massa, ministro de Economía de la Nación, encabezó junto a Juan Andreotti, intendente de San Fernando, la inauguración del Salón Náutico de San Fernando y allí se refirió al nuevo sistema de importaciones que rige desde el pasado lunes en el país. "Había tramposos que usaban artilugios para robarle dólares al Banco Central", señaló.
"Valoramos mucho el trabajo de Juan (Andreotti) en San Fernando, de Alicia (Aparicio), de Luis (Andreotti), que gestionan con una idea maravillosa que se ve reflejada acá: el esfuerzo común entre lo público y lo privado dándole los mejores resultados a la comunidad. Esta expo es una demostración de fuerza y de poderío de nuestra industria náutica en su capital nacional", dijo el titular del área económica nacional y agregó: "Esto muestra la aplicación del talento en la industria, es un orgullo."
En su discurso, Massa se refirió al panorama macroeconómico y al nuevo Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), que sustituye al Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI) y empezó a regir este lunes con el objetivo de dar un mayor ordenamiento y trazabilidad completa a las operaciones, para evitar casos de sobrefacturación, uso abusivo de cautelares y otros mecanismos irregulares.
"Tomamos la decisión de cuidar los dólares de los argentinos para que sirvan para el trabajo, cambiando el sistema de importaciones, protegiendo a la industria. A lo mejor un fabricante de barcos o de lanchas de la argentina tenía régimen no automático y tenía que andar haciendo trámites para importar una parte de esa lancha que le da trabajo a sanfernandinos, a vecinos de Tigre. Sin embargo, quienes querían importar un barco no podían hacerlo de manera automática. Cambiamos esa decisión y el mecanismo, tratando de privilegiar a las PyMEs, trayéndoles no a 180 sino a 60 días el pago de las importaciones y dándoles prioridad porque son las que más trabajo generan en Argentina", manifestó Massa.
Además, dijo que "cambiar el sistema puso blanco sobre negro la trampa versus el trabajo" porque "había tramposos que usaban artilugios para robarle dólares al Banco Central, quitándole los dólares a los que necesitaban una máquina o un insumo para seguir adelante con la producción".
"Ahora gracias a este nuevo sistema que lleva algunos días, en la tarde de hoy ya teníamos $4200 millones aprobados de importaciones, que registraron 8007 empresas de la Argentina. Se cayeron aquellas cosas que eran parte de un festival de importaciones en Argentina del que muchos abusaron. Se cayeron las cautelares de toallas, con la industria textil que tiene el país. Se cayeron las cautelares de máquinas tragamonedas, de mirar cripto. Se cayeron las cautelares de cubiertas, mientras no teníamos abastecimiento y estaban escondidas, retenidas en galpones de aduana o de algunas empresas que stockeaban, jugaban con la necesidad de la gente y aumentaban precio", enfatizó.
En ese sentido, dijo que el nuevo esquema empezó "a normalizar" esa situación: "9.000 millones de dólares se cayeron de la trampa al sistema de importaciones de la Argentina. 2.560 millones de dólares se cayeron de trampas amparadas por medidas cautelares de jueces que entendían que había urgencia en la importación de un Masseratti o de 129 años de producción para una empresa de importación de telas. Esa realidad terminó con este nuevo sistema y pretende que cada una de las empresas pueda garantizar el pago de importaciones, garantizar la línea de abastecimiento y el trabajo".
"De alguna manera también pretende cuidar los dólares que los argentinos con sus exportaciones generan", cerró el ministro de Economía.