Con Placa Madre, el Espacio Cultural de la Biblioteca del Congreso de la Nación continúa una nueva propuesta expositiva que tiene el objetivo de dar visibilidad a artistas plásticos de toda la República Argentina. La muestra será inaugurada el viernes 1 de septiembre desde las 19 horas, y permanecerá expuesta durante tres semanas en el salón ubicado en Alsina 1835, CABA, con entrada libre y gratuita.
La cita estará encabezada por la Presidenta de la Comisión Administradora de la Biblioteca del Congreso de la Nación, la diputada Teresa García, quien se expresó sobre el rol que cumple el espacio: “La puesta en escena de estas obras y sus artistas espera poner en estado de reflexión y debate un momento particularmente prolífico para el arte y la cultura en Argentina y, también, que encuentren en este Espacio Cultural el lugar de albergue para todas estas iniciativas.”
Jorgela Argañarás, de San Isidro, y Damián Masotta, de Morón, serán los dos artistas que bajo la curaduría de Miguel Ronsino presentarán sus obras en las que conviven dos dimensiones: la parte y el todo, lo singular y lo englobante, lo figurativo y lo abstracto. Argañarás y Masotta proponen recorridos que van más allá de las fronteras de los propios cuadros.
Es una pintura de dos corazones heridos por el amor, por la muerte y por el color.
Es justamente Ronsino quien define que Placa Madre “es fundamentalmente una celebración de la pintura”, en la que ambos artistas “exhiben en sus telas un despliegue de gestualidad y color maravilloso y convocan desde la fuerza de sus pinturas a que podamos asistir como espectadores a un diálogo poético entre ambos en torno a coincidencias en sus historias de vida”.
“La muestra nace y tiene sus primeros brotes en una serie de encuentros que tuvimos con Damián Masotta en su taller y en el mío. Los dos atravesamos casi al mismo tiempo, la muerte de nuestras madres, y eso detonó en forma directa sobre nuestra pintura. En mi caso surge una conexión entre los árboles, lo cósmico e infinito. Los árboles, no más sujetos a la tierra, sino gravitando en espacios eternos”, cuenta Argañaráz, la artista sanisidrense, mientras Masotta completa: “Es una pintura de dos corazones heridos por el amor, por la muerte y por el color. Se nos impusieron los tres de repente y sin pedirlos, de tal manera que la pintura y la vida se juntaron a la fuerza y violentamente sin plan de que así fuese, como suele suceder, justamente, con el amor, la muerte y el color”.
La exposición podrá visitarse de lunes a viernes de 9 a 20.30 horas.
