El hogar es uno de los lugares más preciados de cada persona y, por ello, ante un posible hecho de inseguridad la sensación de vulnerabilidad, incluso, en el sitio donde uno debería estar cómodo y tranquilo es sumamente frustrante.
Frente a ello, más allá de habitar en lugares más o menos riesgosos en términos de delincuencia, cada vez son más las personas que se vuelcan a la instalación de cámaras de seguridad en su hogar, como así también en su comercio o empresa.
A su vez, frente a esta demanda y los avances tecnológicos, estos sistemas de vigilancia han dado un gran salto de calidad en cuanto a la facilidad de acceso, la calidad de imagen y la conectividad, entre otros aspectos, para brindar una mayor seguridad.
Para quienes tienen en mente implementar un sistema de cámaras de seguridad, a continuación, repasaremos algunos aspectos importantes a tener en cuenta para hacer una elección más acertada en relación con las necesidades como usuario y las características del lugar donde se deseen colocar.
¿Cuáles son los beneficios de contar con cámaras de seguridad?
Inicialmente, las cámaras de seguridad tenían un uso bastante limitado debido, más que nada, a los costos de instalación y de mantención. Sin embargo, con la proliferación de nuevas tecnologías y dispositivos, la utilización de cámaras de seguridad se ha popularizado. De esta manera, lo que antes estaba limitado al uso en empresas, comercios o para personas con un importante ingreso económico, en la actualidad es más accesible.
Los beneficios de contar con un sistema de cámaras de vigilancia tanto en el hogar como en una oficina o empresa son múltiples.
Uno de ellos es el efecto de disuasión. Los dispositivos ubicados a la vista de potenciales delincuentes ayudan a disuadir en muchos casos ya que los malhechores son conscientes que cualquier acto delictivo que puedan ocasionar quedaría registrado aportando pruebas en su contra para la incriminación.
Del mismo modo, en caso de que el ilícito se cometa, a través del registro capturado por las cámaras es posible contar con pruebas y evidencias para la reconstrucción del hecho y facilitar el trabajo de la justicia en el esclarecimiento o la identificación de los autores.
A su vez, gracias a la conectividad y los dispositivos móviles, es posible realizar una vigilancia en tiempo real de lo que esté ocurriendo dentro del hogar o en el lugar de trabajo desde cualquier lugar del mundo.
Por último, aunque esto debería consultarse con la póliza de seguro contratada, muchas compañías aseguradoras cuentan con planes más económicos para aquellos hogares o negocios que disponen de sistema de vigilancia por cámaras.
Características a tener en cuenta para elegir cámaras de seguridad
Anteriormente se dijo que las cámaras de seguridad se han popularizado y, como tal, en la actualidad es posible encontrar una amplia cantidad de modelos con distintas características.
Aunque el fin es el mismo, no todas las opciones son recomendables. Por ese motivo, es importante comprender algunos aspectos que marcan la diferencia entre una cámara obsoleta y una de buena calidad.
Uno de estos aspectos es la calidad de la imagen. De poco sirve tener un sistema de seguridad donde las imágenes son borrosas o de mala calidad. Una resolución HD de 1080 megapíxeles es lo recomendable para contar con imágenes claras y detalladas que permitan reconocer rostros o disponer de detalles específicos a través de las grabaciones.
En paralelo a esto, es mejor contar con dispositivos con LED infrarroja o sistema de visión nocturna que permita lograr imágenes nítidas incluso en condiciones de baja luminosidad.
El ángulo de visión es un aspecto a considerar teniendo en cuenta, por un lado, el área a registrar y, por otro, la cantidad de cámaras a instalar. Con cámaras con un ángulo de visión de 120° a 180° se podrá tener un registro lo suficientemente amplio como para disponer de menos cámaras para cubrir una mayor área.
En cuanto a la conexión, las cámaras más difundidas en la actualidad cuentan con conexión Wi-Fi que es de las más recomendables teniendo en cuenta que la mayoría de los hogares y espacios de trabajo dispone de ese tipo de conexión a internet.
Vinculado al punto anterior, el almacenamiento también es un aspecto a considerar. Gracias a la conexión a internet, muchos usuarios optan por almacenar los registros en la nube para tener mayor accesibilidad a las filmaciones. Sin embargo, por una cuestión de seguridad, otros prefieren grabaciones en tarjetas SD o discos duros. Optar por uno u otro es sólo una cuestión de preferencias.
La vinculación con las aplicaciones móviles también es un aspecto sumamente relevante. Desde la comodidad de un smartphone o una tablet es posible acceder al sistema y chequear en tiempo real o que está registrando la cámara o, incluso, realizar distintas configuraciones.
Este aspecto también es importante teniendo en cuenta que hay cámaras que pueden vincularse fácilmente con otros sistemas de seguridad como pueden ser alarmas o sensores en las puertas y ventanas teniendo, así, un mayor grado de control y seguridad.
Por último, en caso de que las cámaras vayan a ser colocadas en el exterior y estén expuestas a la intemperie, es importante que sean resistentes al agua y al polvo para garantizar su funcionamiento y prolongar su vida útil.
Consejos para elegir una cámara de seguridad
Antes de iniciar cualquier compra, es importante realizar una serie de evaluaciones con el fin de optar por la cámara que mejor se adapte a las necesidades.
La necesidad es, justamente, lo primero que se debe tener en cuenta. Es importante definir cuál es la necesidad principal por el cual se quiere dotar un negocio, una empresa o un hogar con cámaras para, de esta manera, definir dos aspectos claves: dónde se van a ubicar y con qué objetivo, es decir, si es para una vigilancia a tiempo completo, para monitorear de manera remota o para una supervisión ocasional.
En cuanto a la cantidad de cámaras, siempre es recomendable invertir en las suficientes como para garantizar una cobertura total y evitar que haya puntos ciegos.
Se comentó sobre la amplia cantidad de cámaras disponibles en el mercado y, entre ellas, existen muchas de instalación sencilla que puede realizar el usuario. Según la necesidad, esta puede ser una buena opción, aunque siempre es recomendable que la misma esté a cargo de un profesional.
El mantenimiento no es una cuestión a descuidar. Por un lado, la limpieza es clave para evitar imágenes borrosas y, por el otro, sea por un profesional o uno mismo, es importante chequear que el software siempre esté actualizado.
En casos de vigilancia continua, es recomendable evaluar un sistema de alimentación energética de respaldo que permita que las cámaras continúen funcionando pese al corte del suministro eléctrico para, de esa manera, no se interrumpa la grabación.
Últimas consideraciones
Aunque años atrás parecían sistemas lejanos debido a los costos, la realidad de las cámaras de seguridad hoy es mucho más accesible.
La gran cantidad de dispositivos móviles, las mejoras en términos de registro, la vinculación y el acceso remoto desde cualquier lugar, la simpleza para operarlas ha estado acompañado por una mejora en la relación precio-calidad de servicio, motivo por el cual muchas más personas optan por estos sistemas ya sea para el hogar, como para su empresa o negocio.
