Alumnos, docentes y padres del Colegio Nacional de San Isidro (Escuela Media N°8) fueron desalojados durante la tarde del martes 12 de junio de la institución, luego de que desde la comunidad educativa se votara en asamblea la realización de una vigilia en la institución, pidiendo por la legalización del aborto, la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral, el código de vestimenta y la creación de un protocolo contra la violencia de género en el colegio.
El director de la institución, Oscar Busch, junto a un profesor de biología y personal de maestranza, quisieron impedir que se entrara al colegio y en ese momento se produjo un forcejeo, que derivó en el posterior ingreso de las personas al patio, motivo por el cual Busch decidió dar aviso a la policía de la provincia de Buenos Aires para que desalojaran y también cortar los suministros de agua y gas, lo cual implica la suspensión de clases durante la mañana de este miércoles 13 de junio.
Pasados unos minutos, y ya cerca de las siete de la tarde, alrededor de 12 efectivos policiales armados entraron en la institución, en presencia no sólo de alumnos (muchos de ellos menores de edad), sino también de padres y docentes que se encontraban en el patio de la institución ubicada en Acassuso 165, a metros del centro comercial del distrito.
De acuerdo a lo dicho por testigos de la situación, en el momento del desalojo, y tras nuevos forcejeos entre personal policial y los mayores presentes, dos padres de alumnos fueron golpeados y demorados por la policía, como así también varios alumnos fueron agredidos verbal y físicamente por los efectivos.
Ante los hechos ocurridos, desde el Centro de Estudiantes del Nacional, emitieron un comunicado en el que señalaron: "Repudiamos este hecho de violencia institucional que vulnera nuestro derecho a manifestarnos en favor del aborto legal, seguro y gratuito, y de la ley de educación sexual integral". Además, calificaron de "inadmisible, negligente y nefasto" el accionar policial: "Es inaceptable que dejen entrar a la policía a un colegio público, cuando por ley se sabe que eso no puede suceder de ninguna manera".