Seducía hombres, programaba citas en sus domicilios, y cuando lograba quedarse con su confianza los sedaba y les robaba. Así actuaba Amado, un Viudo Negro que fue atrapado en las últimas horas, luego de denuncias hechas por dos de sus víctimas, ambos vecinos de San Isidro.
La primera de ellas, un vecino de 60 años que vive en la calle General Paz, fue una de las tantas engrupidas por el Viudo: consensuó un encuentro a principios de junio y luego de compartir unos mates en su casa, se desvaneció. Cuando despertó, la sorpresa: Amado se había ido, y no sólo eso, sino que había llevado sus pertenencias. Joyas, alhajas, el celular y varios electrodomésticos fueron el botín con el que el Viudo Negro se escapó.
Personal de la Comisaría 1° de San Isidro, a cargo del Comisario Cristian Carrizo, se encargó de seguir adelante con la investigación del caso y, escuchas telefónicas mediante, se logró deducir que se trataba del mismo victimario que había sido denunciado por otro vecino de Beccar, de 61 años, en mayo pasado, a quien, con la misma metodología, también le robó varios elementos, entre ellos su auto, un Renault Symbol.
Finalmente, el Viudo fue detenido en Avellaneda. Allí, personal policial encontró dinero en efectivo en pesos, dólares y euros, teléfonos celulares, joyas, relojes, billeteras, televisores, anteojos, y, a unas cuadras de su domicilio, el auto que había robado en a mediado de mayo.
Ahora, la causa quedó caratulada como "robos reiterados", y está a cargo de la UFI encabezada por Patricio Ferrari, correspondiente al departamento judicial de San Isidro.
