“Es un orgullo recibirlos y llegar un acuerdo para el beneficio de nuestra comunidad. Desde el municipio vamos a escuchar toda propuesta que busque favorecer a las personas que más lo necesitan. Agotaremos todas las instancias posibles que nos permitan combatir y superar la difícil situación alimentaria que nos toca vivir en la Argentina”, señaló el intendente de Tigre, Julio Zamora, en un encuentro con los representantes de la fundación Banco de Alimentos de Buenos Aires, con quienes firmó un convenio para ayudar a 140 merenderos del distrito, mediante donaciones a comedores locales y el acceso a la mercadería a un menor costo.
Por otra parte, desde el municipio se expresó el compromiso de acompañar a la entidad en el asesoramiento de habilitaciones y planos para que puedan instalar su propia base de operaciones en la localidad de Benavídez.
“Nuestro intendente suscribió un convenio que nos va a permitir darle soporte a los merenderos de muchísimas familias de Tigre que, como en muchos otro lugares de la Argentina, la están pasando mal. Estamos para acompañar y fortalecer cualquier colaboración que pueda hacer la sociedad civil en beneficio de los sectores más vulnerables del distrito”, señaló el secretario de Política Sanitaria y Desarrollo Humano, Gonzalo Meschengieser.
En esta línea, y en el marco de una visita al merendero Rincón de Carlín de Don Torcuato, Marisa Giraldez, directora general de la fundación, aseguró que “el balance del encuentro es extremadamente positivo” y que “además de estar trabajando con muchas organizaciones del partido de Tigre, entendemos que con esta firma van a surgir acciones que nos van a permitir potenciar el trabajo nuestro en conjunto con el municipio para el beneficio de merenderos y organizaciones sociales".
Sobre la fundación Banco de Alimentos
La fundación Banco de Alimentos de Buenos Aires es una organización sin fines de lucro que contribuye a reducir el hambre, mejorar la nutrición y evitar el desperdicio de alimentos. Reciben a diario donaciones de alimentos y productos de parte de empresas, productores agropecuarios y supermercados. Luego, las distribuyen entre las organizaciones sociales que dan de comer a personas que lo necesitan.