El viejo Tom es uno de los jefes de la barrabrava de Platense y tenía pedido de captura vigente por haber sido parte de un secuestro extorsivo el pasado mes de abril. En las últimas horas, fue detenido por efectivos de la Policía Federal, luego de una persecución que terminó en inmediaciones de la rotonda de la Autopista Panamericana y Avenida Rolón, en la localidad de Boulogne.
El detenido es Alejandro Acosta, de 27 años, y está sospechado de encabezar un entramado delictivo que derivó en el secuestro de una mujer, que sería la hija de un narcotraficante, cuando ingresaba a su casa en la calle Recuero al 3300 de la Ciudad de Buenos Aires. Junto a otros tres criminales, privó de su libertad a la víctima y exigió el pago de un rescate que ascendía a 297 mil pesos.
La madre de la damnificada debió dejar una bolsa con el dinero detrás de un hospital del barrio Santa Rita, en Boulogne. Momentos después la mujer secuestrada fue liberada en las inmediaciones del shopping Unicenter. Desde ese momento, la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal profundizó las tareas de inteligencia criminal para desarticular a la banda.
En ese marco, dos de los integrantes de la red fueron detenidos el 17 de mayo pasado frente a las instalaciones de Platense. Uno de ellos, Kevin Ariel Torres, también era señalado como uno de los cabecillas de la barrabrava del club. A continuación se fortaleció la pesquisa en torno al Barrio Mitre, detrás del shopping DOT: seguimientos, vigilancias y registros audiovisuales daban cuenta del posible paradero del Viejo Tom.
Fue así que los efectivo observaron a Acosta cuando se desplazaba a bordo de un automóvil Peugeot 308 blanco. Al salir del barrio, el imputado percibió la presencia de las brigadas e intentó darse a la fuga, subiendo a la autopista Panamericana en Vicente López. En su plan de escape, chocó a varios autos, pero fue interceptado en cercanías a la rotonda de avenida Rolón, en Boulogne. Allí, se subió a la vereda e intentó irse corriendo, siendo atrapado metros más adelante.
A instancias de la Justicia, se incautó un teléfono celular y documentación que puede resultar interés para la causa. Los investigadores continúan trabajando en la búsqueda de otros responsables del secuestro.