Un viejo juicio que poco parece tener que ver con la discusión sobre el cambio de COU en un predio del Hipódromo.
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| Castellano en sesión defendiendo el cambio de COU |
Por Ariel Gómez Barbalace
En estos días, el Presidente del Concejo Deliberante e intendente interino de San Isidro, Carlos Castellano salió por distintos medios a defender la decisión tomada por el bloque oficialista de modificar el Código de Ordenamiento Urbano de 4,3 hras del hipódromo de San Isidro a pedido del Jockey Club.
Uno de los principales argumentos usado por el concejal fue que de no otorgar la zonificación al Jockey el municipio podría afrontar otro juicio millonario como fue en el Paseo de Fátima, según lo afirmara en el programa televisivo Región Norte. Argumento que es repetido en las redes sociales (en muchos casos bajo perfiles falsos) por las militancia possista.
Para aportar información a la discusión pública recordamos que el Paseo de Fátima es un predio sobre la avenida Libertador en Martínez. En el año 1974 la empresa Promenade S.R.L inició un expediente ante la Municipalidad realizando una consulta sobre la posibilidad de construir un centro habitacional y comercial en un predió que el código de edificación calificaba como “zona parque”.
Tras estudiar los informes técnicos el 16/09/1974 el Concejo Deliberante aprueba el proyecto presentado por la empresa y la ordenanza fue promulgada por el decreto 496/74. Posteriormente la Municipalidad aprobó los planos de obra.
Ya en el año 1976, durante el gobierno de facto, cuando la empresa ya había comprado el terreno y con todas las autorizaciones correspondientes había ejecutado el 65% de la obra, el intendente de facto, Cnel. José Maria Pedro Noguer, por razones de “necesidad y conveniencia” deroga las ordenanzas e impide a la empresa seguir adelante las obras.
Esto derivó en un jucio millonario que debió afrontar la Municipalidad de San Isidro y pagaron sus vecinos con un adicional en su tasa de ABL durante muchos años.
Claramente, el caso del juicio del “Paseo Fátima” poco tiene que ver con la actual discusión pública acerca del cambio de Código de Ordenamiento Urbano en una porción del Hipódromo de San Isidro, en favor de los intereses del Jockey Club.
