Desde el próximo lunes 6 de febrero, el precio del pan subirá cerca de un 6% y en consecuencia el kilo se ubicará cerca de los $500. Desde el sector explicaron que la medida se debe a los incrementos en los costos de las tarifas de energía y combustibles.
De todas formas, el kilo de pan ya se comercializa a $500 en amplias zonas de la Ciudad de Buenos Aires y en algunos barrios del conurbano bonaerense.
"Lamentablemente no nos queda otra alternativa, ante los reiterados aumentos que venimos sufriendo en las tarifas de energía, combustibles y materias primas", explicó Martín Pinto, presidente del Centro de Industriales Panaderos de la localidad bonaerense de Merlo.
Pinto afirmó que “tuvimos que tomar esta determinación para seguir cuidando nuestra industria, nuestras pymes y la fuente de trabajo de los panaderos”.
“Hacemos un llamado a los sectores empresarios y las autoridades del gobierno para que frenen los incrementos, porque las subas de precios significan restricciones y bajas en el consumo y eso, en el corto y mediano plazo, significa cierres de panaderías y despidos de personal, algo que queremos evitar”, finalizó el dirigente de la industria panadera.