La imagen es la más buscada por todos los padres, que no pueden contener su emoción: sus hijos de cinco años en el jardín de infantes bailando, divertidos, viéndose las caras nuevamente en persona y no por Zoom. Eso sí, todos respetando la distancia entre ellos, en círculos demarcados, con tapabocas y alcohol en gel cerca.
Es que después de ocho meses, los jardines de infantes de San Isidro volvieron a abrir sus puertas para que los alumnos de sala de cinco empiecen actividades socioeducativas en grupos reducidos, realizando propuestas al aire libre y respetando un protocolo sanitario.
“Siento una alegría enorme de que los niños vuelvan a tener un contacto con el jardín, sus compañeros y docentes. En todos lados hay asistencia perfecta así que sin dudas había muchas ganas de reencontrarse”, afirmó Marisol Reigosa, directora general de Educación de San Isidro, desde el Jardín Municipal N° 5 de Martínez.
Junto a ella, Macarena Posse, a cargo de la coordinación entre el Municipio, entidades intermedias y vecinos, agregó: “Es muy emocionante ver a los chicos de salita de cinco, que se van a egresar y se conocen desde los tres años, poder hacer juntos en persona el cierre de esta etapa”.
Además explicó que todos estos encuentros de revinculación son supervisados por inspectores de la Dirección General de Escuelas de la Provincia de Buenos Aires, que controlan el cumplimiento del protocolo sanitario que entre sus principales medidas establece:
- Encuentros con grupos burbuja de nueve alumnos.
- Toma de temperatura corporal antes de ingresar al jardín.
- Respetar el distanciamiento social, con espacios demarcados.
- Uso de tapabocas.
- Desinfección de zapatos y mochilas.
- Higienización de manos.
En los encuentros socioeducativos, el foco está puesto en hacer actividades lúdicas y pedagógicas con juegos, bailes y música. En todos los casos la asistencia es optativa y el establecimiento educativo provee los elementos de higiene y cuidado personal.