Constanza Santos, vive en San Isidro, tiene 22 años y un bebe de 9 meses. El último martes, alrededor de las 3 de la tarde, sufrió un acto de abuso de autoridad por parte de la Policia Comunal cuando le impidieron amamantar a su bebe en la plazoleta del mástil, en el centro comercial de San Isidro.
“Fui al Banco Nación, estuve esperando una hora y ya lo tenía a mi hijo llorando como loco. No me dejaron pasar antes ni nada y el estaba irritadísimo. Me senté en el mástil, en los bancos que hay ahí, y le empecé a dar ahí. Entonces veo que se me quedaron mirando los policias que estaban a unos metros, pero no le di importancia. Cuando levanto la vista las tenía a dos policías, chicas de aproximadamente 20-25 años de edad, y una me dice que presente el documento mío y del bebé, y la otra me dice que no podía amamantar en la vía pública, que había una ley que lo prohibía. Yo sorprendida por lo que me decían y nerviosa porque el nene se me despegó y lloraba, aparte re prepotentes fueron, ni un buen día, les pregunto si me estaban cargando, y les digo que no tengo conocimiento que haya ninguna ley de ese tipo, y que mi hijo estaba llorando, tenía hambre y yo no estaba haciendo nada malo” conto la joven a QuePasa.
“Y seguían insistentes con que les diera el documento, les dije que no estaba haciendo nada malo, estaba dándole de comer a mi hijo, y el bebe lloraba desconsolado, mientras seguían insistiendo prepotentes, muy violento todo” señaló Constanza.
“Les pedí que me dijeran cual era la ley que avalaba eso q me decían porque me tenía que retirar, o que llamaran a un superior, y me decían que no tenían q llamar a nadie que me retirara. Me tuve que parar porque me agarró el brazo y la otra me decía que me iban a llevar por resistirme a la autoridad. Me tuve que ir con el bebe a upa llorando, el cochesito y la mochila”.
"En la mano de enfrente estaban policías hombres, fui hacia ellos y les dije si me podían dar el nombre de las chicas esas de enfrente a lo que me dijeron que no, rotundamente sin explicación, mientras se me reían en la cara. Fue todo demasiado violento, me sentí una mierda, Me costó muchísimo calmar a mi bebe después. Tuve que ir a gastar guita que no tengo para tomar un café en un barsito porque mi hijo no paraba de llorar y encima ahí, nadie hacia nada y me miraban mal, como para rematarla”.
Constanza contó que piensa realizar la denuncia por esta situación, y convoca a una "teteada masiva" el sábado 23 a las 15hs. en el mástil, en la calle Belgrano y Acasusso, San Isidro.