En la noche del miércoles, vecinos del country Ayres del Pilar, en el que Lázaro Báez cumplirá prisión domiciliaria, realizaron un cacerolazo y bocinazo en protesta a llegada del empresario quien abandonará el penal de Ezeiza tras una definición del Tribunal Oral Federal (TOF) Nº 4.
La manifestación se desarrolló en las puertas del barrio. Allí, un grupo de habitantes del lugar se juntaron para mostrar su rechazo. "Esto es una vergüenza, estamos sin poder trabajar, sin salir a la calle, haciendo lo que nos pide el Presidente y lo liberan a Lázaro. Esto es una joda”, dijo a los medios televisivos que se encontraban en el lugar una vecina del barrio, entre golpes de cacerolas y bocinazos que se sumaron a la manifestación.
El descontento de algunos vecinos se debe a que este miércoles 8 de julio, el Tribunal Oral Federal (TOF) N°4 dispuso la excarcelación de Báez en la causa que se le sigue por lavado de dinero y, si bien abandonará el penal de Ezeiza, seguirá cumpliendo prisión preventiva domiciliaria, en el marco de otro expediente.
Los jueces además le impusieron una caución real de más de $632 millones que sus abogados calificaron como "exorbitante y de imposible cumplimiento", por lo que reclamaron que se le fije otra acorde a la realidad material del imputado (que se encuentra embargado e inhibido) y se les permita contratar un seguro de caución.
Los jueces dispusieron, además, que Báez deberá someterse al cuidado del Programa de Asistencia a Personas Bajo Vigilancia Electrónica del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, mediante la colocación de un dispositivo de monitoreo electrónico de GPS, con un radio de 100 kilómetros a la redonda del lugar de residencia informado.
En el mismo fallo los magistrados le impusieron la obligación de presentarse al tribunal cada 15 días y la retención de su pasaporte e interdicción de expedir nuevos a su nombre, más la prohibición de salida del país.