En la ya tradicional cena realizada en el salón Tattersall del Hipódromo de San Isidro participaron más de 700 personas que aportaron su gesto solidario para el colegio Parroquial.
Con el lema "La educación deja huella" se realizó el pasado viernes la cena a beneficio benefició del Colegio Parroquial Domingo Savio, del barrio La Cava de Beccar. Más de 700 personas colmaron el salón Tattersall del Hipódromo de San Isidro, colaborando con el sostenimiento de la tarea educativa y social de la institución dependiente del Obispado de San Isidro.
Entre los presentes, referentes de la política local y provincial como el Intendente de San Isidro, Gustavo Posse, la Ministra de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, Cristina Álvarez Rodriguez, el senador provincial Sebastian Galmarini, la concejal y candidata a la intendencia Marcela Durrieu, el funcionario provincial y también candidato a intendente, Santiago Cafiero, los concejales Jorge Álvarez, y Marcos Hilding Ohlsson, entre otros.
El párroco de La Cava, Jorge Garcia Cuerva se dirigió al público y afirmó "Seguimos teniendo un sueño grande que es una educación de calidad para nuestro hermanos más pobres. Estamos convencidos que la gran pobreza de nuestro país es educativa, y por eso apostamos a romper con esa gran brecha de inequidad que hace que nuestro chicos no tengan tantas posibilidades como otros".
"Nuestro lema es que la educación deja huellas. El modelo social que nuestro Papa tanto critica deja heridas. Qué bueno que nosotros apostemos a un mundo más integrado, donde nuestros hermanos más pobres tengan posibilidades y ya no dejar heridas, sino dejar huellas" concluyó Cuerva.
En diálogo con los medios, el obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, afirmó que el evento "es una manera de tender un puente social para tratar de entendernos mejor. Detrás de estas mesas y de la comida debe estar el rostro de nuestros chicos, el horizonte y el futuro de cada uno de ellos”.
También, el intendente de San Isidro, Gustavo Posse declaró que ”En un lugar que hace más de 50 años era el asentamiento de emergencia más grande de la Argentina, la Villa La Cava, un lugar muy fuerte para todos los Argentinos y ni que decir para los sanisidrenses. El tener la escuela parroquial ahí, con el esfuerzo conjunto de todos. El municipio invierte en la escuela hace muchos años, desde antes que yo fuera intendente" y agregó “el Colegio refleja un esfuerzo docente y administrativo grande, sostenido en el tiempo. Era una escuelita parroquial y hoy se ha convertido en un instituto muy grande con tres niveles educativos".
Por su parte, la candidata a intendente Marcela Durrieu destacó “el enorme compromiso y el amor con el que el Padre Jorge y todos los miembros del Domingo Savio llevan adelante su incansable tarea”. La candidata a Intendente agregó: “Para nosotros es una enorme alegría que este colegio parroquial siga creciendo. Sin dudas la educación es una herramienta única para igualar oportunidades y luchar contra las inequidades que persisten en San Isidro”.