Facturó y aguantó. Chacarita venció 2-0 a Estudiantes de Buenos Aires en Caseros, donde no ganaba hacía mucho tiempo. Con este resultado, el Funebrero se acomoda en puestos de reducido.
¿QUERÉS RECIBIR LAS NOTICIAS DEL FUNEBRERO POR WHATSAPP? - Acá dice cómo (no es grupo)
Tres cambios introdujo Juan Manuel Azconzábal respecto al empate contra Deportivo Morón en San Martín: Alejandro Rébola, Maximiliano Meléndez y Ricardo Blanco sustituyeron a Hernán Rivero, Juan Cruz González (lesionado) y Maico Quiroz, respectivamente.
Llevado a la práctica, el ingreso de Ricardo Blanco estuvo acertado. Porque cuando poco transcurría en el partido, "Ricky" se hizo cargo de un tiro libre y su gran centro encontró la cabeza de Federico Bravo, quien sólo debió empujarla para establecer el 1-0.
Iban 21 minutos, el Funebrero ganaba por la mínima y pasaba a administrar los hilos del encuentro. Del otro lado se encontraba un Estudiantes que se mostraba inconexo y con dudas, sobre todo en la mitad de la cancha.
Por ello, los de Villa Maipú bien pudieron haber engrosado el tanteador, esta vez con el balón desde el suelo. Meléndez corrió por el sector derecho, cedió con Rodrigo Salinas y éste descargó hacia atrás, donde se situaba Agustín Araujo: el ex Racing sacudió desde afuera del área y su disparo pasó cerquita del travesaño.
Hacia el complemento, la propuesta de Chacarita fue clara: aguantar los embates de Estudiantes. Y ante un Tricolor replegado en su campo, el Pincha de Caseros atacó bastante, principalmente por las bandas.
Tuvo posibilidades de lastimar, siendo la más clara a través de Agustín Paz, que al recibir un pase de Sebastián Ramírez, remató fuerte y Nicolás Avellaneda salvó milagrosamente al tiro de esquina.
En un breve término de cinco minutos, Azconzábal ejecutó cuatro modificaciones. Primeramente entraron Valentín Chocobar y Tomás Ortíz por Blanco y Antonio Napolitano. Luego, lo propio hicieron Víctor Figueroa y Hernán Rivero en lugar de Salinas y Araujo.
A poco del cierre y tras soportar varias aproximaciones rivales, Chaca se acomodó nuevamente y hasta liquidó el cotejo. Después de un pelotazo de Agustín Quiroga hacia Rivero, el atacante quedó mano a mano con el arquero oponente, lo tumbaron dentro del área y el árbitro Yamil Possi sancionó penal. Del mismo se hizo cargo Figueroa, rematando a la derecha de Matías Budiño y ampliando la ventaja para Chaca.
No hubo tiempo para más. Chaca ganó 2-0 y se llevó un enorme triunfo a San Martín. Su próximo juego, como local, será ante Defensores Unidos de Zárate.
