Cambian los intérpretes y los esquemas, pero lo que no cambia es el resultado. Chacarita perdió 3 a 2 frente a Quilmes por la fecha 5 de la Zona Reválida B de la Primera Nacional. Salvando los últimos 15 minutos, el Funebrero, como en casi todo el certamen, volvió a mostrar una pobre actuación, evidenciando su flojo armado de plantel durante el mercado de pases.
Chacarita había comenzado mejor que Quilmes. Tal es así que, apenas a los 5 minutos estuvo muy cerca de concretar el primer gol de la tarde, luego de una buena arremetida por derecha de Vega que culminó con un disparo desviado de Fergonzi.
Sin embargo, en una nueva ocasión, el buen juego duró muy poco, apenas 2 minutos: largo pelotazo a Pavone quien, al recibir el balón, enganchó, perfiló y facturó, mediante un sablazo al sector derecho de Cousillas, que nada pudo hacer.
Chaca sintió el golpe, el Cervecero comenzó a dominarlo y, en consecuencia, llegó el segundo tanto. A la postre de una pérdida de pelota en la mitad de la cancha, vino un centro desde la derecha, el cual fue capitalizado por Bauman, quien la mandó a guardar.
Para mal de males, cuando promediaban los 30 minutos, el arquero debutante Cousillas debió ser remplazado por Tripodi, a causa de un fuerte golpe en su codo izquierdo.
El complemento aún arrancó todavía más cuesta arriba para el Tricolor, ya que, apenas a los 4 minutos, nuevamente Pavone estiró el marcador, mediante un centro desde la izquierda de Acevedo, el cual el “Tanque” lo capturó a la perfección, decretando el 3 a 0.
En ese dificultoso marco y al no poder revertir la situación, Chacarita creció en impotencia y en nerviosismo, e Insúa se fue expulsado por doble amarilla a los 21 minutos de juego.
Y aún más en ese panorama, resultaba muy impensado una posible remontada por parte del Funebrero, sin embargo, se dio. Primero a los 32´, con Gobetto, quien facturó mediante una serie de rebotes en el área; y luego a los 36´, con Baiardino, quien la empujó tras un mal despeje del arquero.
Pese a ello, ambos goles resultaron solo para la estadística. Llegó el cierre del encuentro y el Tricolor terminó cayendo por 3 a 2. Demasiado sentido no tiene analizar la nueva derrota, ya que la clave, una vez más, estuvo en el armado del plantel, el cual volvió a fallar, como en los últimos años.
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