| SAN ISIDRO | Con votos del possismo, UCR, Socialismo y GEN, el Concejo Deliberante avanzó con el polémico proyecto.
A pesar de la media sanción de la ley de expropiación de las tierras del barrio Uspallata (ver nota), el oficialismo junto a sus aliados avanzaron en aprobar el proyecto de compra de los terrenos del barrio para erradicar a las familias y posteriormente venderlos desocupados, a mayor valor. De esta manera, el municipio está autorizado a comprar unas tierras sobre las cuales habrá una ley de expropiación y tendrá que iniciar acciones legales contra la ley si desea avanzar con su proyecto, asumiendo este litigio en el lugar del actual titular.
Vecinos de los barrios Uspallata - Iberlucea |
Cerca de la media noche, después de casi 12 horas de sesión, con un Concejo Deliberante que cerró sus puertas al acceso libre de los vecinos, mientras en las calles del centro de San Isidro circulaba un falso volante profundizando la campaña sucia y de desinformación (ver nota), se realizó un fuerte debate ante las presencias del desarrollador inmobiliario O´Connor, quien posee la titularidad de algunas parcelas y expresa representar al resto de los dueños, y unos pocos vecinos que lograron ingresar.
O´Connor, titural de algunas de las parcelas del barrio Uspallata. |
El proyecto oficial final tuvo algunas modificaciones del original (ver nota): quitó la cláusula discriminatoria que exigía a los vecinos irse de San Isidro y elevó el monto del subsidio a $450 mil.
El concejal possista Pablo Fontanet, defendió la posición oficial diciendo que “con este proyecto pretendemos darle una solución habitacional a los vecinos del barrio Uspallata, a vecinos que viven en una situación de precariedad, no sólo por el acceso a los servicios sino por la situación legal de ocupación de esa tierra”.
Marcos Hilding Olhsson de Convocación señalo que “parte del deterioro al que se refería Fontanet es responsabilidad del Gobierno Municipal al no instalar los servicios básico para un barrio como cloacas, apertura de calles. Hay una responsabilidad municipal en dejar el barrio olvidado”.
La concejala Marcela Durrieu expresó conocer el barrio desde hace 40 años, por vivir en las cercanías y por haber tenido de pacientes a vecinos del lugar. Contó que en esas zonas donde no había nada, y no llegaba ni el asfalto ni ningún servicio, las familias llegaban y se instalaban como lo hicieron los colones en gran parte de nuestro país. Luego, con el desarrollo, los terrenos fueron tomando valor y llegaron compradores que, reconociendo los derechos de posesión de quienes las habitaban, compraban esos terrenos y los titularizaban.
Durrieu también señalo que la posesión legítima y pacífica sin título, amparada por la ley, es una situación que se da en muchas zonas de San Isidro y no por eso se han dejado a esas zonas sin servicios por décadas como en Uspallata. “Acá hubo una política deliberada de dejarlos sin servicios” afirmó la concejal que acusó al oficialismo de ser parte de un negocio inmobiliario.
“A mí un poco me avergüenza que quienes conocen perfectamente esta situación y saben que los legítimos poseedores de esos terrenos son quienes los habitan pacíficamente hace 60 años, no sean capaces de defenderlos hoy” concluyó Durrieu, mirando al concejal Fontanet con quien militó en el peronismo años atrás.
En sus exposiciones, tanto la concejal Ester Fandiño como Manuel Abella hicieron referencia al informe que a pedido de un grupo de concejales, la ONG TECHO realizó sobre el barrio Uspallata (ver nota). Fandiño definió al proyecto oficial como “desalojo económico” y se preguntó: “¿éste es el San Isidro que queremos, esto queremos hacer con nuestros vecinos, una ecuación que cierre económicamente y que excluya del lugar a 62 familias que hace mas de 40 años están radicadas en el lugar y consolidando la precariedad de los títulos que ostentan quienes pretenden venderle al Municipio las tierras?”.
La concejal Longo del GEN, contrariando la posición de su partido a nivel provincial (ver nota) adelantó su voto a favor del proyecto possista. Dijo que este debate permitía dejar sentada las bases de un modelo para solucionar el problema de los asentamientos y las villas de emergencia en San Isidro. “El proyecto que nosotros apoyamos busca darle una solución habitacional a familias que se encuentran en un inmueble de un privado, sin derechos y sin expectativas de lograr el domino del mismo”.
La concejal Yaqueline Girassolli (PJ-FPV), hizo referencia a la decisión de las autoridades del Concejo de cerrar la sesión dejan a muchos vecinos de Uspallata sin posibilidad de presenciar el debate. Luego leyó una carta de un grupo de vecinos. En ella los vecinos denunciaron engaños y presiones de funcionarios municipales. “Somos familias que hace décadas habitamos y cuidamos este suelo. Acá nacimos y crecimos 4 generaciones y de ninguna manera queremos irnos. Es por eso que pedimos a ustedes que se comprometan con la defensa de nuestro derecho constitucional” expresaba un párrafo de la carta.
El concejal Brest (PJ-FPV) comenzó diciendo: “acá no hay una discusión entre legalidad y legitimidad. Acá la discusión es la defensa de intereses privados contra la dignidad de los vecinos que viven en el barrio Uspallata. Se dice siempre desde el oficialismo que muchos quieren venir a San Isidro, y nuestra solución a esto es darles plata para que se vayan”.
El concejal peronista acusó de hipocresía al proyecto oficial, que afirma que los vecinos después de ser erradicados podrán seguir haciendo uso de los servicios municipales, cuando hoy no son atendidos en el Hospital Municipal, por no reconocerles el domicilio. También acusó al oficialismo de una política deliberada de ausencia del Estado para presionar a que los vecinos se vayan del lugar. Finalmente Brest señaló que acá no se pretende un “realojamiento” sino un desalojo, ya que no existe consentimiento de los vecinos.
“No me gustaría estar en el lugar de ustedes que tienen que definir el destino de 62 familias que no se quieren ir de este distrito. También sé que hay concejales que forman parte de fuerzas mayoritarias en otros ámbitos, hoy están votando de forma diferente a lo que hicieron sus legisladores en la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires (vernota). Tal vez defendiendo intereses locales, no creo que ideológicos, porque sinó votarían como lo hicieron sus diputados provinciales” concluyo Brest en referencia a los concejales del socialismo, GEN y UCR.
Luego, el concejal por el socialismo Fernando Pose, agradeció irónicamente la referencia de Brest y defendió su apoyo al possimo por el fallo de la corte que declaró inconstitucional la ley de expropiación del año 1992. El concejal fue interrumpido por una vecina del barrio que le explicó que esa ley fue declarada inconstitucional porque abarcaba, no sólo los terrenos habitados, sino otros que estaban vacios. “Yo no sé si esto está bien o si esto está mal, yo voy a votar con lo que dicta mi conciencia”.
Desde el oficialismo, Jorge Alvarez defendió el proyecto diciendo: “acá hay una posibilidad para que ciudadanos puedan acceder a una vivienda propia y puedan ser propietarios. Es mentira que con casi 50 mil dólares no se puedan comprar en San Isidro. Y además se puede ayudar a que estas personas accedan a crédito de la banca Estatal, que le permita tener una vivienda con mejores condiciones”.
Al pasar a la votación, se pidió que sea nominal (que cada concejal exprese de forma individual su voto, y quede asentado en la versión taquigráfica) pero el possismo y sus aliados se negaron.
La compra de los terrenos del barrio Uspallata por parte del municipio para la erradicación de la familias del lugar fue aprobada con los votos a favor por los 11 concejales del possismo: Castellano, Fontanet, Alvarez, Rolón, Bologna, Area, Arena, Pereira, Posse, Nuñez, Heidenreich. Tambien votaron por la afirmativa los concejales Juncos (Ucr), Pose (socialismo), Longo (Gen).
En contra de este poryecto estuvieron del Frente Para la Victoria Martín, Brest, Girassolli y Bringas; de Convocación Hilding Olhsson, Abella; por el Frente Renovador, Marcela Durrieu; por el denarvaismo, Fandiño; y de Libres del Sur, Aguirre. Ausente al momento de este debate Gelay del Frente Renovador