Imagen satelital con avance de cenizas.
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La nube de cenizas volcánicas proveniente del volcán chileno Calbuco llegaron alrededor de las 11 de la mañana a la ciudad de Buenos Aires, confirmaron a Clarín fuentes del Servicio Meteorológico Nacional (SMN). Desde el SMN aclararon que la capa que llegó es muy delgada y se ubica a gran altura, a unos 6.000 metros de la superficie terrestre, por lo que se ve como una bruma.
“La llegada de las cenizas a la ciudad de Buenos Aires hará que el cielo se vea algo brumoso. Serán cenizas muy finas y livianas, que estarán a unos 6.000 metros de altura y que no impedirán que el cielo brille en la ciudad”, había explicado temprano esta mañana Miriam Andrioli, meteoróloga del SMN.
Si no se registraran nuevas erupciones, no está previsto que lleguen a la ciudad cenizas más densas y éstas que ya arribaron se disiparán en algunas horas hacia el océano Atlántico.
Según muestran los mapas provistos por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) la nube de material volcánico cubre ya una vasta zona del centro del país. Y sus previsiones indican que en pocas horas estarán en el cielo uruguayo.
Lo previsto por el SMN para el mediodía de hoy es que la nube de cenizas sobrevuele buena parte de Mendoza y de La Pampa, la mitad sur de San Luis, los extremos sur de las provincias de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, gran parte de la provincia de Buenos Aires y la Capital Federal. Andrioli le dijo a este diario que a las 8.30 de la mañana de hoyya podía observarse ceniza volcánica sobre varias localidades de la provincia de Buenos Aires, como Azul, Bahía Blanca, Mar del Plata, Olavarría y Tandil.
Ante la llegada de las cenizas a la Ciudad, el Ministerio de Salud porteño emitió un comunicado en el que aclaró que no son tóxicas, pero sí pueden provocar en algunos casos irritación en mucosas respiratorias (ardor y picazón), en los ojos (ojos rojos) y en piel. Los pacientes alérgicos o con trastornos respiratorios pueden sentir más sus efectos pero, tranquilizaron las autoridades, "sin consecuencias graves".
Carmen de Patagones, al borde del río Negro y frente a Viedma, fue la primera ciudad bonaerense donde se advirtió el fenómeno, durante las primeras horas del día. Con el amanecer, pudo apreciarse ya presencia de cenizas sobre el cielo de Bahía Blanca, a una altura estimada entre los 3.000 y los 5.000 metros. A las ocho de la mañana, el cielo de Bahía Blanca se mantenía opaco y se preveía que continuara en esa condición al menos hasta el mediodía, para cuando se esperaba que las cenizas se dispersaran. El aeropuerto de Bahía Blanca permanecía abierto y operable.
Fuente: Clarin
