Con el objetivo de evitar la proliferación del mosquito Aedes Aegypti, transmisor del dengue, en San Isidro continúan realizando todos los días los operativos de fumigación nocturnos.
El Municipio lleva adelante campañas de concientización para eliminar criaderos de mosquitos (agua estancada) en domicilios y colocación de trampas en sitios estratégicos.
“Más allá de que bajó la temperatura, el problema sigue vigente ya que el mosquito se adaptó a estas condiciones. En San Isidro trabajamos, de forma intensa, hace más de cinco años para afrontar la problemática”, aseguró Carlos Balate, de la Subdirección de Zoonosis y Control de Vectores.
A modo de prevención, actualmente están fumigando con larvicida para atacar las larvas y huevos que sobreviven al frío y pueden durar hasta un año.
“Las máquinas adquiridas permiten que el producto que utilizamos, para derribar al mosquito, quede más tiempo suspendido en el aire y abarque más metros cuadrados”, agregó Balate.
Las fumigaciones se llevan a cabo en espacios públicos, como plazas o paseos costeros, arboledas y frentes de viviendas, entre otros lugares.