Álvaro Biderman, un joven de 24 años oriundo de Pilar, emprendió este domingo una travesía extraordinaria que lo llevará desde Buenos Aires hasta Nueva York, acompañado por tres caballos criollos: El Moro, Carozo y Metemiedo. A lo largo de 20.000 kilómetros, Álvaro se detendrá en centros de equinoterapia y plantará árboles, demostrando su compromiso con el medio ambiente y la sanación a través de los animales.
Desde pequeño, Álvaro supo que los caballos eran su pasión. A los 17 años, decidió trabajar como peón en un campo, donde pasó un año entero en estrecho contacto con la naturaleza, una experiencia que marcó su vida profundamente. Siete años después, tras un proceso de autoconocimiento, decidió seguir su sueño de recorrer América a caballo, inspirado por la histórica travesía de Aimé Félix Tschiffely, quien realizó una hazaña similar en 1925.
En una entrevista con TN, Álvaro explicó que su objetivo es mostrar "el poder sanador que tienen los animales, que es mucho más del que creemos, y visibilizar el trabajo de los centros de equinoterapia". Además, busca inspirar a las personas a acercarse a los caballos y a cuidar del planeta. "Es mi sueño más profundo, es mi destino y mi sentido de vida: en mi paso por el planeta tierra, quiero dejar algo mejor en el mundo", expresó.
A pesar de los desafíos y los miedos, Álvaro se siente motivado y preparado para enfrentar cualquier obstáculo. "Yo los tengo que cuidar, porque soy el ser humano y el líder consciente que los involucra en esta travesía, y eso conlleva un montón de responsabilidad. Me lo tomo como mi sueño, estoy jugando, pero responsablemente", asegura con convicción. Para ello, se capacitó en diversas habilidades necesarias para el viaje, como el cuidado y la herradura de los caballos, así como primeros auxilios.
Para seguir de cerca su aventura, Álvaro documentará todo el viaje a través de su canal de YouTube (@AlvaroBiderman), donde compartirá cada paso de esta increíble travesía, mostrando el impacto de los centros de equinoterapia y la importancia de cuidar nuestro planeta.
En las últimos días, publicó el primer video de su canal donde mostró su primer encuentro con los caballos que los acompañarán en la aventura, se refirió al porqué de esta aventura y habla de su fuerte creencia religiosa en Dios. "Yo siempre fui un soñador anarquista absoluto, de la vida, de los límites. Me hicieron creer que era un problema, pero era mi espíritu, mi fogosidad interna que me decía que no era por ahí. Creo en Dios profundamente. Él tiene un plan para nosotros, escrito, que lo escribió antes de pensarte y que nazcas. Creo en el libre albedrío".
Además, reflexionó: "Tenes dos caminos en la vida: seguir el camino de la mente (del sistema) o del corazón. Cuando seguis el del corazón ahí te conectas con el destino que el plan supremo que dios pensó para vos y eso se llama plenitud".