En el marco de controles que se llevan adelante en la vía pública para identificar la venta ambulante, en vísperas de las pascuas, personal del Municipio de Escobar decomisó más de 250 kilos de pescado que eran comercializados en forma clandestina en diferentes puntos del distrito.
De acuerdo a lo que informaron desde la comuna, los responsables de los puestos de venta ambulante exhibían ejemplares "frescos" tratados previamente con lavandina y vino tinto, "con el objeto de modificar las características organolépticas de las piezas y embaucar a los potenciales compradores".
"Esa actividad es ilícita y potencialmente dañina para la salud publica. Los pescados comercializados se encontraban en envases y bolsas sin un sistema de cadena de frío, vital para su correcta conservación", explicaron.
Además, desde el municipio recomendaron que, en caso de tener que comprar este tipo de mercadería, "se haga en locales o puestos habilitados a tal efecto y nunca en la vía publica, dado la falta de medidas bromatológicas que potencialmente pudieran ocasionar intoxicaciones tras su ingesta".