Un hombre de 30 años fue detenido en José León Suárez en el marco de la investigación por el homicidio de Silvia Graciela Lepez, ocurrido el 26 de febrero en Vicente López. La detención se produjo el 27 de febrero luego de que los investigadores lograran rastrear los movimientos de los sospechosos a través del análisis de cámaras de seguridad municipales y privadas.
Según la reconstrucción de los hechos, la banda delictiva utilizó al menos tres vehículos para desplazarse antes y después del crimen. El Volkswagen Fox negro, que los delincuentes abordaron tras abandonar otros dos automóviles en San Martín, fue clave para la detención del acusado. Este vehículo tenía una patente adulterada que correspondía a un Peugeot 208, lo que permitió a los investigadores establecer su trazabilidad. Al ser hallado en José León Suárez, se implementó una vigilancia discreta en la zona ante la posibilidad de que alguno de los implicados regresara a buscarlo.
Fuentes policiales señalaron a Infobae que el ahora detenido se acercó al automóvil con cautela. “Miraba para todos lados antes de subirse al coche, encenderlo y retirarse del lugar”, indicaron. Fue interceptado a unas cuadras de allí y quedó detenido.
El detenido cuenta con antecedentes por encubrimiento y, aunque algunos investigadores lo señalan como el posible autor del disparo que mató a Lepez, la Fiscalía de San Isidro continúa con la búsqueda de al menos tres sospechosos más.
En su declaración indagatoria, el acusado negó haber participado en el homicidio y aseguró que no se encontraba en el lugar del hecho. “Jamás robé nada ni mataría a nadie”, expresó. También sostuvo que puede probar su versión con registros de cámaras de seguridad cercanas a su domicilio. “Yo no estuve [en la escena del crimen]. No soy ninguno de esos [los ladrones filmados por las cámaras de seguridad]. Estaba en mi casa. Hay cámaras de seguridad. Cuando pasó esto, entre las 19 y las 20, yo salí de mi casa en mi bicicleta azul”, declaró ante la justicia según confirmaron fuentes a La Nación.
Respecto a su vínculo con el Volkswagen Fox negro, el detenido explicó que el auto pertenecía a un amigo, quien le pidió que lo retirara al día siguiente a cambio de dinero. También mencionó que esa persona le dejó una bolsa con una remera marca Fila negra, prenda que coincidía con la vestimenta de uno de los sospechosos filmados en el robo de un Toyota Yaris, vehículo que los delincuentes usaron para llegar a la escena del crimen.
Durante la indagatoria, el detenido proporcionó la dirección de su supuesto amigo, quien habría conducido el Volkswagen Fox negro y sería, según su versión, el verdadero dueño del automóvil. Sin embargo, los investigadores aún no han localizado a esta persona. Mientras tanto, el acusado continuará detenido mientras avanza la investigación.
El homicidio de Silvia Graciela Lepez ocurrió el 26 de febrero en Munro, Vicente López. La víctima, de 54 años, se encontraba junto a su esposo en su Chevrolet Tracker cuando fueron interceptados por dos delincuentes armados que intentaron robarles el vehículo. En ese momento, el esposo intentó evadir el asalto con una maniobra, pero los ladrones dispararon y una bala impactó en la cabeza de la mujer.
El crimen generó conmoción en la comunidad y el reclamo de justicia por parte de su familia. Nicolás, hijo de la víctima, en diálogo con Radio Rivadavia, expresó: “No se merecía esto mi mamá. Lo único que queremos es que se haga justicia y que atrapen a los culpables”. También relató detalles del momento del ataque: “Fue en la esquina de mi casa. Mi papá y mi mamá volvían del gimnasio. Mi papá estaba estacionando y los interceptaron dos masculinos [sic]. Él aceleró porque se lo pidió mi mamá y ahí le dispararon. Justo ella tenía la ventanilla baja”.
A partir de los registros de cámaras de seguridad, los investigadores establecieron que la banda se movilizó en distintos vehículos durante la fuga. Luego de dispararle a Lepez, los delincuentes huyeron corriendo hasta la intersección de Porchia y Misiones, donde robaron una Ford Territory blanca. Este segundo vehículo fue clave en la reconstrucción del caso, ya que quedó registrado en las cámaras de seguridad del municipio, lo que permitió rastrear su recorrido hasta San Martín.
Una vez en San Martín, los delincuentes abandonaron la Territory junto con el Toyota Yaris y abordaron el Volkswagen Fox negro que, días después, permitió la detención. Ahora, la investigación avanza en la identificación del resto de los involucrados en el crimen.