Horas atrás, cayó una banda dedicada al juego ilegal que operaba en los partidos de San Martín y Tres de Febrero. De acuerdo a lo informado por las fuentes policiales fueron 37 los operativos en los que se detuvo a cuatro socios, entre los que se encontraba el líder del grupo, Don Gerardo. Además, también fueron aprehendidos otros dos hombres vinculados con la actividad.
450 policías de Seguridad, Drogas Ilícitas, División Halcón y Grupos de Apoyo Departamental (GAD) de diversas zonas integraron los allanamientos, donde se supo que la banda también se dedicaba a la comercialización de cocaína y para todos los ilícitos usaba locales “fantasma” como pantalla.
Según los voceros, los acusados utilizaban distintos comercios para ejercer la actividad ilegal: uno de ellos era un almacén ubicado sobre la calle Mercedes al 3900, en San Andrés (partido de San Martín), donde principalmente se tomaban jugadas de quiniela ilegal, y otro se encontraba en Santa Rosalía al 930, de la misma localidad. Sin embargo, el bunker central donde se recibían todas las apuestas estaba ubicado en Esteban Merlo 5056 de Caseros (partido de Tres de Febrero), donde a modo de “pantalla” los miembros de la banda habían montado un local de venta de colchones. También hubo operativos en Villa Ballester y en Capital Federal.
En los allanamientos, los efectivos decomisaron computadoras en las que se cargaban las apuestas, equipos de telefonía, faxes, mobiliario de oficinas, armas y alrededor de un millón de pesos, aunque se estima que recaudaban unos dos millones semanales. Entre los elementos secuestrados, también había talonarios de “La Borratina”, un juego no oficial que vale un peso y en el que se eligen cinco números de dos cifras que se juegan a lo largo de un día.
Los investigadores aseguraron que Don Gerardo, el cabecilla de la organización, era secundado por otros dos hombres conocidos como Tingui y Fabio, que se dedicaban exclusivamente a recibir los pedidos, los cuales están registrados en escuchas telefónicas.
Además de los seis detenidos por juego clandestino, fueron demoradas 12 personas que se desempeñaban como empleados administrativos en el lugar y otras dos que tenían en su poder una pistola, dos revólveres, municiones, un cuchillo y otros elementos.
Todos los detenidos y los elementos secuestrados quedaron a disposición de la fiscalía de Delitos Complejos de San Martín, a cargo de Verónica Andonaides, e imputados por “asociación ilícita y defraudación al Estado”.