Efectivos de la Policía Federal capturaron ayer por la tarde a Jorge Antonio Olivera, un ex represor que se había fugado del Hospital Militar el 25 de julio de 2013. El hombre, acusado de cometer crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura cívico militar, fue encontrado escondido dentro de un auto en la casa de su ex pareja, en San Isidro.
Según informaron fuentes judiciales a Infobae, los seguimientos mediante escuchas telefónicas detectaron que Olivera podía estar en la casa de su ex mujer. En este sentido, el fiscal Franco Picardi pidió allanar el lugar y el juez Claudio Bonadio hizo lugar al pedido.
Durante en allanamiento, la Policía Federal encontró la cama matrimonial utilizada y ropa de hombre. Los oficiales comenzaron a revisar toda la casa y encontraron a Olivera escondido en el auto que estaba en el garaje de la casa.
El represor no opuso resistencia y será puesto a disposición del Tribunal que lo condenó y del SPF. Por la fuga están procesados una decena de ex directores y jefes del SPF, entre ellos quien era su titular en 2013, Víctor Hortel.
Olivera se había escapado junto a Gustavo de Marchi, quien había sido detenido en Almagro en diciembre de 2015. Ambos se fugaron cuando estaban bajo custodia del Servicio Penitenciario Federal (SPF). Hasta allí habían llegado desde San Juan para realizarse estudios médicos, luego de que el Tribunal Oral Federal de San Juan condenara a Olivera a prisión perpetua y a De Marchi a 25 años de prisión por delitos de lesa humanidad.