El ministro de Economía, Luis Caputo, definió la suspensión de los aumentos de tarifas de luz y gas previstos para mayo a través una nota enviada al secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo. Aunque la decisión ya se conocía desde el 30 de abril, requiere de procesos administrativos para su implementación.
Caputo explicó que esta medida busca consolidar el proceso de desinflación que el Gobierno llevó a cabo. "Resulta razonable y prudente postergar en mayo la aplicación efectiva de las actualizaciones dispuestas", señala la nota 47529453, citada por el sitio EconoJournal. La postergación afecta las resoluciones de los entes reguladores de electricidad (ENRE) y gas (ENARGAS), que habían dispuesto incrementos tanto para los servicios de transporte y distribución como para los precios mayoristas de energía y gas.
La misiva sugiere que el Gobierno podría retomar los aumentos en junio, ya que instruye a los entes reguladores a proceder "exclusivamente a la postergación en el mes de mayo". Sin embargo, fuentes oficiales advierten que no está definido qué sucederá con las tarifas el próximo mes.
El Gobierno tiene como objetivo mostrar una tasa de inflación menor mes a mes. En un mensaje en su cuenta de X (exTwitter), Caputo afirmó: "Porque estamos cómodos en lo fiscal, priorizamos bajar la inflación y no cargar con más gastos a la clase media, de momento".
Sin la suspensión, los usuarios de "ingresos altos" (Nivel 1 de la segmentación, aproximadamente el 30% del total) hubieran enfrentado un incremento del 77% en el precio mayorista de la energía, pasando de $44.401 por megavatio-hora (MWh) a $78.555, lo que representa el 40% de la boleta final en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
En cuanto al gas, el precio mayorista hubiera subido de 2,89 dólares a 4,43 dólares por millón de BTU, también solo para usuarios N1. Además, las tarifas de transporte y distribución habrían sumado entre 10 y 12,5 puntos porcentuales para todos los niveles.
Actualmente, el 70% de los hogares tiene más del 95% de la energía eléctrica y alrededor del 75% del gas natural subsidiados. La implementación de la Canasta Básica Energética, que debía contener un nuevo esquema de ayuda estatal, también se postergó y no estará definida hasta bien entrado el invierno.
