Tras dos jornadas de paro por parte de los trabajadores municipales de San Isidro, que culminaron la medida de fuerza con una movilización frente a la Municipalidad, desde el ejecutivo municipal que encabeza el intendente Ramón Lanús emitieron un duro comunicado y aseguraron que el paro "tuvo una mínima adhesión" y "es puramente político".
"El paro es puramente político, promovido por el kirchnerismo quien negó la conciliación obligatoria, afectando a los vecinos por tratarse de un distrito que no los vota", criticó Manuela López Menéndez, jefa de Gabinete de San Isidro.
A través de una comunicación oficial, desde la gestión de Lanús afirmaron que "el paro tuvo una mínima adhesión de 400 empleados sobre 6000 y los servicios municipales funcionan con normalidad" y criticaron los "cortes de calles por parte de asociaciones políticas ligadas al kirchnerismo y a otros distritos".
Por otra parte, también criticaron al ministro de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, Walter Correa, quien días atrás brindó su apoyo al Sindicato de Trabajadores Municipales de San Isidro (STMSI): "Se ha negado a dictar la conciliación obligatoria frente a un reclamo salarial de los trabajadores que venía encausado a través del diálogo del Municipio con sus empleados. No es casualidad que Correa haya participado el sábado pasado en un acto en el distrito con el sindicalismo local."
Desde la gestión municipal señalaron que "detrás de la decisión del Gobierno Provincial, al negar la conciliación, hay intereses políticos y que no hay verdadera vocación por encontrar una solución para los trabajadores".
"La delicada situación de la caída del poder adquisitivo del salario municipal es una realidad que afecta a toda la Provincia de Buenos Aires y que no es ajena a San Isidro. El objetivo de la gestión en la discusión salarial es poder recomponer para que los empleados no pierdan contra la inflación. Con las últimas actualizaciones pautadas para agosto y septiembre, el aumento acumulado del año queda en un 92,66%. Además, se actualizaron las compensaciones por 'horas extra' del personal y se terminaron las arbitrariedades en el pago de las mismas. Por último se otorgaron dos bonos en enero y mayo, y en septiembre se suma uno nuevo. Cabe aclarar que los ajustes de los últimos dos meses aplican, a diferencia de otros años, a bonificaciones y complementos", detallaron en el comunicado.
"A pesar de todas estas mejoras y que la estructura salarial es la misma que años anteriores, el sindicalismo local, bancado por el kirchnerismo de la Provincia, promovió igual un paro de 48 horas que afecta a los vecinos", finalizaron.
