Bárbara Zaccardi tiene 24 años, vive en el barrio El Triángulo de Escobar y es la protagonista de una historia solidaria, en la que la comunidad la ayudó a conseguir una prótesis para poder operarse y volver a caminar. A principios de octubre, sufrió un accidente que hoy casi milagrosamente puede contar. Fue embestida por el tren: el impacto le fisuró varias costillas y le fracturó el fémur. Estuvo internada desde ese entonces sin poder moverse por sus propios medios y gracias al esfuerzo económico colectivo logró intervenirse días atrás y ya lleva adelante su recuperación.
El accidente ocurrió en la localidad de Belén de Escobar el 2 de octubre del año pasado, cuando la joven, que estaba en una fiesta familiar, fue a hacer compras. "Cuando crucé la vía no escuché el tren. Me chocó y me fracturó la pierna, las costillas y me pinchó los pulmones. Tuve hemorragias internas y estuve 15 días en coma", relató Bárbara a QUE PASA en aquel momento, cuando aún se encontraba internada en el hospital provincial Enrique Erill.
El fémur izquierdo de Bárbara sufrió una fractura expuesta y por eso necesitaba la colocación de una prótesis y clavos en la zona. Según sus propias palabras, no se podía mover de la cama, fueron casi dos meses de estar internada porque no tenían cómo afrontar los costos de la prótesis que debía comprar: salía $980.000 y por eso recurrió a la comunidad para poder conseguir el dinero.
Luego de dos rifas y del acompañamiento desinteresado de muchas personas que donaron para la causa, la familia de Bárbara logró juntar el dinero necesario para la compra de los insumos. "Estoy muy agradecida. Con la campaña recaudamos casi $940.000, la mayoría donó sin querer comprar los números para la rifa, sólo por el hecho de ayudar", contó Bárbara a este medio, ya desde su casa, recuperándose de la operación que le realizaron el pasado 26 de diciembre. Además, hubo otra donación de $470.000 que le sirvió para comprar un corsé, por una fractura sufrida en la quinta vértebra.
Actualmente Bárbara se maneja en silla de ruedas y comenzará en pocos días la primera parte de la rehabilitación, con kinesiología y la posibilidad de pasar a la utilización de muletas para manejarse por sus propios medios. Según le indicaron los médicos, el proceso completo de recuperación le demandará entre 6 meses y un año.
"Es un proceso, pero estoy bien. Continúo con controles en traumatología e infectología, para hacer el seguimiento de cómo el cuerpo incorpora la prótesis. Pude pasar el 31 con mi familia, eso es una felicidad. La recuperación va a ser larga porque la rodilla sufrió mucho daño al tenerla tanto tiempo quieta y traccionada", culminó la joven.