Estela Díaz, ministra de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires, sostuvo que "la agenda del futuro" en cuanto a las problemáticas de las mujeres tiene que ver con zanjar la desigualdad laboral que sufren en la actualidad. Además, brindó datos sobre violencia de género, valoró el proyecto de ley presentado para poder abordar esta problemática y analizó el cambio positivo que provocó la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo en los casos de aborto en el territorio bonaerense.
En diálogo con el programa radial de QUE PASA, Díaz definió a la violencia de género como "un problema estructural en nuestra sociedad" y sostuvo que "la violencia doméstica familiar es la que más se ha logrado visibilizar".
"No sólo que se ha hecho visible, de que ya no hay naturalización, estamos construyendo cada vez más programas, más políticas, más herramientas para la intervención y desde que se creó el ministerio nosotras hemos rediseñado el sistema integral de políticas contra las violencias por razones de géneros que empezó con 8 programas y hoy tiene 20 que trabajan en la prevención, la asistencia, la atención, políticas para las salidas de las violencias y en el acceso a la autonomía económica", destacó la funcionaria bonaerense y añadió que "esas herramientas estamos construyéndolas con mucha territorialidad, trabajando con los municipios, porque es ahí, en cada territorio donde sufren esa vulneración de los derechos y donde hay que responder".
En relación al registro de números sobre los hechos de violencia de género, Díaz indicó que "hay una tendencia a la baja, pero está claro que un asesinato a una mujer es el dato que nos preocupa, pero por lo menos hay un camino con más Estado presente, con más visibilidad del tema, tenemos que seguir construyendo más alertas tempranas para que cada vez ese número sea más significativo en la reducción".
En este sentido Díaz destacó la presentación de un proyecto de ley para el abordaje de la violencia de género: "Tenemos muchas expectativas, estuvimos más de un año trabajando en el desarrollo de este proyecto. Nuestra provincia tiene solo ley de violencia familiar (Ley 12569/00), pero ya ha quedado cómo una sábana corta".
"Necesitamos una legislación integral para abordar no solo la violencia doméstica familiar, sino que para abordar todos los otros tipos de modalidades de la violencia y también para trabajar más en detalle el procedimiento judicial", afirmó y sostuvo que "va a tener muchas herramientas para la intervención, tenemos mucha expectativa en que el legislativo de la Provincia lo debata y que este año lleguemos a que se pueda sancionar".
A poco más de dos años de la sanción de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, la ministra analizó la situación de su implementación en el territorio bonaerense. "La provincia de Buenos Aires tenía alrededor de 200 espacios de atención de lo que antes eran los abortos legales por causales. A partir que llegamos a la gestión, se volvió a implementar el protocolo que la ex gobernadora (María Eugenia Vidal) no implementaba, pero además con la ley sacamos un nuevo protocolo complementario. Hoy hay alrededor de 550 consejerías de atención del aborto en la provincia de Buenos Aires. Muchas en la atención primaria de la salud, en los municipios".
"Sólo el 30% de los municipios tenía atención del aborto cuando llegamos y hoy creo que faltan dos o tres exclusivamente que no la tienen", dijo y destacó: "La Provincia ha comprado la droga Misoprostol que se genera en un laboratorio público de Santa Fe y el laboratorio de la Universidad de La Plata está creando Mifepristona, que es la otra droga con la cual la efectividad va a ser de un 99%. Cada vez avanza más el derecho para que el acceso al aborto sea una realidad y salve vidas. Hoy es prácticamente imposible encontrar casos de muertes o lesiones por aborto, nosotros teníamos una morbimortalidad, muchos efectos nocivos a la salud de las mujeres que han desaparecido prácticamente con la legalización del aborto".
La desigualdad laboral: una cuenta pendiente
"La agenda que viene es el trabajo de las mujeres y cuando nos referimos a esto, hablamos del trabajo y el cuidado porque para nosotras el trabajo remunerado productivo y el trabajo de cuidados y de reproducción de la vida son un continuo. Vamos y venimos entre un trabajo y otro y eso impacta en las brechas de desigualdad", sostuvo.
En relación a esta problemática, aseguró que "el Estado cada vez la va colocando más en la agenda y tiene un rol promotor de derechos, tiene un rol facilitador de diálogo y de favorecimiento incluso del diálogo social con empresas y sindicatos para que esta agenda se tome: favorecer licencias, construir espacios para el cuidado comunitarios infantil, promover que las mujeres accedan a los trabajos que son mejor remunerados con profesionalizaciones y oficios que están absolutamente masculinizados y que suelen ser los que mejor se pagan, así que todavía hay dificultades".
"Nosotras tenemos varias líneas de trabajo para promover el acceso de mujeres en sus sectores. Ahí hay mucho para hacer y para nosotras es la agenda que viene. El trabajo es el organizador de la vida. El trabajo con derecho y con igualdad y radicando esas brechas de desigualdad es la agenda del futuro", sostuvo.