Los primeros días del gobierno de Mauricio Macri están signados por la gran cantidad de medidas económicas que marcan un importante cambio de rumbo con respecto a las políticas llevadas adelante por el gobierno kirchnerista. QuéPasa se acercó a referentes sindicales de la región norte para preguntarles como se ven estas medidas desde sus gremios.
El Secretario general de ATE Zona norte, Fabián "Moncho" Alessandrini fue muy crítico del rumbo económico y señaló que el nuevo gobierno "hizo una gran transferencia de recursos para los sectores de más ingresos, y está claro que tiene un acuerdo con los grandes grupos económicos y con la patria financiera, porque sino no se entiende como durante estos días el dólar se mantuvo tan estable. A cualquier otro gobierno que hubiera tomado estas medidas, a los pocos días le explota el país".
"A los trabajadores esto nos destruye el salario en función de que hoy si querés comprar un kilo de carne no baja de 140 pesos en cualquier carnicería. Esa carne que comemos los laburantes y que no sabemos si vamos a poder seguir comiendo" afirmó Alessandrini y con respecto a las paritarias opinó que "ya hemos perdido gran poder adquisitivo y va a ser difícil recuperarlo".
A pesar de eso, concluyó: "Nosotros vamos a pelear para que el salario esté lo más arriba posible cuando tengamos que definir el porcentaje de aumento en las paritarias, pero esta película ya la vimos: ahora viene la excusa que para mantener las fuentes de laburo no hay aumento salarial y esto pone en riesgo el trabajo también, porque se viene un período de recesión. Las tasas de intereses van a estar muy altas y eso hará que quien tiene un mango para invertir no lo haga y especule, esto hará que se enfríe la economía. Ojalá nos equivoquemos, porque lo que queremos los laburantes es que a Argentina le vaya bien para que nos vaya bien a los argentinos."
En la misma línea, desde la CGT zona norte, José Luis Casares opinó que “las medidas tomadas por el nuevo gobierno son preocupantes porque impactan directamente en el bolsillo de los trabajadores. La devaluación del peso, el incremento del dólar y el precio de los alimentos, implica casi una rebaja salarial para el trabajador”.
“Como CGT estamos pidiendo un bono de fin de año de $3 mil pesos como mínimo. En febrero empieza la paritaria y veremos lo que sucede”, sostuvo.
Por su parte, Hugo Russo, secretario general de la CTA zona norte y dirigente del gremio AJB San Isidro, comentó: “Estamos en un estado de alerta muy preocupante, la escalada de devaluación afecta a los trabajadores. Solicitamos apertura de paritarias en enero, un bono de fin de año de $5 mil pesos para el gremio de judiciales, aumento salarial del 50%, teniendo en cuenta la inflación y la devaluación."
“Estamos evaluando la situación y esperando que se trate el presupuesto de la Provincia 2016 que será el 29 de diciembre, el presupuesto que se le asigne a la justicia para nosotros es clave”, manifestó Russo.
Y advirtió que en el caso de que no logren una paritaria cesaran las actividades en febrero: “En caso de que no logremos obtener nuestro derecho de paritarias en enero no vamos a retomar las actividades. Somos el único gremio que no tenemos ley de paritarias. El proyecto está en Diputados y fue consensuado con la Corte, pero está parado”.
Desde la Economía Popular, Érica Pereyra coordinadora de CTEP Vicente López, opinó: “Vemos una situación compleja para los trabajadores informales que son a los que nosotros representamos. Las transferencias de ingresos a los sectores exportadores, los trabajadores informales son los primeros que lo sienten porque no tienen el apoyo del Estado. La apertura de las importaciones va generar el cierre de fábricas y empresas que se recuperaron por los trabajadores desde el 2001. Hoy más que nunca esas experiencias deben fortalecerse”.
CTEP es una organización gremial representativa de los trabajadores de la economía popular que nuclea diferentes espacios políticos como la Movimiento de Trabajadores Excluidos, Movimiento Evita, Frente Popular Darío Santillán, entre otros.
“Hace unas semanas obtuvimos reconocimiento gremial, todavía no hemos tenido paritarias. Vamos a presionar al gobierno para obtener derechos. Nos une la lucha por la conquista de derechos ante la desprotección del Estado”, comentó Pereyra quien afirmó que el país se registra un 33% de trabajadores en situación de informalidad.