Imputan al padrastro de Manuel Storani por el choque de lanchas

El fiscal encargado de la causa cree que su lancha “invadió” el carril contrario. La otra embarcación circulaba a alta velocidad.

 

Fuente: Clarín

 

El fiscal que investiga el choque de lanchas del jueves en el que murió Manuel, el hijo del dirigente radical Federico Storani, tiene pruebas para imputar al padrastro del chico. El hombre en cuestión es Lucas Sorrentini, dueño de la embarcación y quién la conducía. Los investigadores consideran que “invadió” el carril por el que circulaba la lancha que venía en sentido contrario y que impactó contra la suya.

Después de tres días de búsqueda, Prefectura Naval dio con el cuerpo del adolescente y ayer despidieron sus restos en el cementerio Jardín de Paz, ubicado en General Rodríguez, donde ya había sepultado a su madre, Angeles Bruzzone, que también falleció como consecuencia del brutal impacto.

En el transcurso del fin de semana la causa cambió de manos. El fiscal Facundo Osores Soler, el primero en investigar el hecho, consideró que como el incidente se produjo en la jurisdicción de Tigre le correspondía a su par de la Unidad de Funcional de Instrucción N°1 de Rincón de Milberg, Mariano Magaz, continuar con la pesquisa.

De acuerdo a fuentes judiciales consultadas por Télam, Magaz imputará al viudo de Angeles Bruzzone, madre de Manuel Storani, por homicidio culposo. La prueba con la que cuenta el fiscal es que las primeras pericias indicaron que la lancha que conducía Sorrentini invadió el carril contrario.

La causa ya tenía un imputado. Se trata de Pablo Torres Lacal, dueño y timonel de la lancha Shark II, quien permanece internado en el Hospital Italiano en estado gravísimo y fue acusado de homicidio culpado agravado. De acuerdo con las primeras reconstrucciones del hecho, Torres Lacal venía en zigzag, a más de 60 kilómetros por hora por el canal Vinculación y cuando llegó al río Luján, partió al medio la lancha en la que viajaban Bruzzone y su hijo, ambos fallecidos en el impacto, junto a un grupo de amigos.

“La lancha Shark II quedó con la manija de aceleración del motor en posición de máxima velocidad. Después del impacto, esta lancha no sólo cruzó volando medio río, sino que además terminó 30 metros para adentro, en tierra”, dijo un investigador a la agencia de noticias estatal. Prefectura Naval tendrá listo el viernes un informe con más precisiones. Magaz esperaría verlo para avanzar con la decisión de imputar a Sorrentini.

El choque de lanchas ocurrió el jueves por la noche. Bruzzone, su pareja y su hijo, junto a un grupo de amigos, habían ido a cenar a un restorán ubicado sobre el arroyo Pajarito, en el Delta. Luego volvieron a la lancha en la que habían llegado y Sorrentini navegó rumbo a la guardería donde suelen dejar su embarcación. Iban por el río Luján y llegando al cruce con el canal Circunvalación, divisaron una lancha que se acercaba a gran velocidad, la de Torres Lacal. Sorrentini hizo una maniobra brusca hacia la derecha pero no pudo evitar el choque: la embarcación de Torres Lacal partió al medio la suya. Ninguno llevaba puesto el chaleco salvavidas.

Hubo tres muertos: Francisco Goti, que iba en la Shark II, y Bruzzone y su hijo. Manuel, de 14 años, estuvo desaparecido durante tres días. Dieron con su cuerpo a las 22.30 del domingo. Lo encontró personal a bordo del guardacostas 166, que rastrillaba una zona, sobre el canal Vinculación, a sólo 400 metros del lugar del incidente. Su padre, Federico Storani, acompañó la búsqueda desde la madrugada del viernes. Estuvo en la base que Prefectura tiene en San Isidro, se subió al helicóptero y a las lanchas. “Manuel no tuvo ninguna chance”, dijo en un programa radial.

“Traumatismo de cráneo, cuello roto, múltiples fracturas”, eso le dijo el perito forense al fiscal Magaz apenas vio el cadáver. Esos primeros detalles no son menores: indican que Manuel murió producto de los golpes. “Igual que su madre, no se ahogó. Ya lo presuponíamos porque de acuerdo con lo que reconstruimos con los testimonios, el chico iba ubicado en la línea del impacto”, dijo un vocero judicial. En la lancha, Manuel y su madre iban sentados uno junto al otro. El cuerpo de Bruzzone fue hallado después del choque. La autopsia determinó que murió, también, a consecuencia del golpe: sufrió derrames internos que le produjeron un paro cardiorrespiratorio por explosión del bazo.

Los restos de Manuel y su madre están desde ayer en un cementerio privado. Del velatorio participaron los compañeros del colegio Cristóforo Colombo, al que asistía el chico, y políticos como Ricardo López Murphy y Facundo Suárez Lastra, entre ellos.