El presidente Javier Milei destacó este domingo que "los argentinos, de manera contundente, han expresado una voluntad de cambio que ya no tiene retorno" y resaltó que "no hay vuelta atrás". "Hoy enterramos décadas de fracaso, peleas intestinas y disputas sin sentido, que lo único que han logrado es destruir nuestro querido país y dejarnos en la ruina", completó.
"Hoy culminamos la etapa de declive y empezamos la reconstrucción de nuestro país", dijo y añadió: "Enterramos décadas de fracaso y peleas, que dejaron en la ruina a este país. Hoy comienza una era de paz, prosperidad, desarrollo, libertad y progreso".
"Ningún gobierno ha recibido una herencia peor que la que estamos recibiendo nosotros. El kirchnerismo hoy nos deja déficits fiscales gemelos por el 17% del PBI, de esos 15% corresponden al consolidado del Banco Central y el déficit fiscal. La solución implica un ajuste fiscal en el sector público de un 5% del PBI, que caerá casi totalmente sobre el Estado y no sobre el sector privado", detalló.
Además, señaló que es necesario "limpiar los pasivos remunerados del Banco Central" para "ponerle fin a la emisión de dinero" y eso permitiría "atacar la única causa de la inflación empíricamente cierta en términos teóricos". "Haber emitido como hizo el gobierno saliente, por 20 puntos del PBI, no es gratis. Lo vamos a pagar inflación", sostuvo.
"El cepo cambiario, otra herencia de este gobierno, no sólo constituye una pesadilla social y productiva porque implica altas tasas de interés, bajo nivel de actividad, escaso nivel de empleo formal y salario reales miserables que impulsan el aumento de pobres e indigentes, sino que además el sobrante de dinero en la economía hoy es el doble que había en la previa del Rodrigazo", definió Milei.
En este sentido, argumentó que de seguir con el cepo que él desea levantar, "se podría pasar a una tasa anual inflacionaria del 3600%". "Esta es la herencia que nos dejan, una inflación plantada del 15000% anual
"No hay alternativa posible al ajuste", enfatizó Milei y agregó: "Tampoco hay debate entre shock y gradualismo". "Para hacer gradualismo, es necesario que haya financiamiento y lamentablemente no hay plata", sentenció el presidente. Enfatizó, además, que el ajuste que pondrá en marcha "impactará de modo negativo sobre el nivel de actividad, empleo, salarios reales y cantidad de pobres e indigentes".
"Habrá estanflación, pero no es algo muy distinto a lo que pasó en los últimos 12 años. Hace más de una década que vivimos en estanflación. Este es el último mal trago para comenzar la reconstrucción de Argentina", manifestó y explicó: "El populismo nos está dejando 45 por ciento de pobres y 10 por ciento de indigentes. El cuadro de situación parece irremontable, por eso no hay alternativa posible al ajuste y no hay posibilidad de un gradualismo porque todos los gradualismo terminaron mal", dijo Milei en un discurso principalmente con ejes económicos que brindó en las escalinatas del Congreso nacional.
Por otra parte, dijo que "se acabó con el siga siga de los delincuentes" y señaló que "el entramado social está totalmente roto, pero los planes contra la pobreza sólo generan más pobreza. La única forma de salir de la pobreza es con más libertad".
Por último, indicó que "de corto plazo la situación empeorará" pero expresó que, "luego, veremos los frutos de nuestro esfuerzo habiendo cambiado las bases de un sistema sólido".
"No va a ser fácil: 100 años de fracaso no se deshacen en un día pero hoy es ese día; terminamos el camino de la decadencia y comenzamos a transitar el camino de la prosperidad. Tenemos la resiliencia para salir adelante", afirmó en su discurso, en el que propuso un "nuevo contrato social en el que el Estado no dirija nuestras vidas sino que vele por nuestros derechos" y en el que advirtió que, "quien corta las calles, no recibirá asistencia de la sociedad: el que corta no cobra".
