Dos policías bonaerenses están siendo juzgados en el Tribunal Oral N°5 de San Martín, por estar acusados de haber torturado mediante la aplicación de picana eléctrica a unos jóvenes, a quienes apuntaban falsamente por un robo.
Los hechos por el que se los juzga ocurrieron el 2 de junio del 2021, en horas de la madrugada, en perjuicio de las víctimas Gabriel Fleitas, Brandon Quiroga (ambos de 18 años) y Sebastián Linardi, de 16, quienes caminaban por una calle de Tres de Febrero.
Un patrullero de la policía bonaerense, conducido por Cristian Figueredo y Sergio Amori, del Comando de Patrullas del distrito, interceptó a los jóvenes y comenzó a acusarlos de un robo que había sucedido momentos antes en una fábrica de la zona.
Según denunciaron los chicos, los efectivos le propinaron patadas en el cuerpo. A Figueredo lo denunciaron puntualmente por extraer una herramienta de descarga eléctrica portátil y aplicársela en las nalgas a Quiroga y Fleitas, a quien por accidente se le había activado el teléfono celular.
Tras ello, resultaron trasladados a una comisaría, donde aseguraron, sufrieron malos tratos físicos y psicológicos, además de que les labraron actuaciones por un presunto "robo agravado".
De todas maneras, la intervención de los familiares de los detenidos abortó esa acusación y dio paso a la denuncia por apremios ilegales contra los policías.
El fiscal Raúl Sorraco constató el pasaje de corriente eléctrica en la dermis de los damnificados y ordenó la detención de los policías Amori y Figueredo, que afrontan ahora el juicio oral.
En la primera jornada del juicio, las tres presuntas víctimas ratificaron sus relatos y reconocieron al policía Figueredo como el autor de la aplicación de las descargas eléctricas y a Amori como "partícipe" de esa práctica.