A través del Taller de Carpintería, programa “Construyendo Sueños”, más de 70 chicos que concurren diariamente a la Casa de Día para luchar contra sus adicciones renovaron y reciclaron sillas y mesas que luego entregaron a la Escuela Media N°1 del barrio Infico.
Jóvenes de entre 11 y 21 años con problemas de adicción reciben ayuda y contención en la Casa de Día, ubicada en Cordero 2046, dependiente del Municipio de San Fernando. Allí realizan actividades deportivas, recreativas, talleres de oficio y reciben asistencia psicológica.
Una de las actividades es el taller de carpintería “Construyendo Sueños” en el que, luego de una capacitación, arreglan mobiliarios para escuelas del distrito.
Al respecto, la Secretaria de Educación, Cultura y Contención Social, Alicia Aparicio, expresó: “Esta es la primera entrega de material escolar reciclado por los chicos de la Casa de Día. El taller de carpintería es muy positivo para ellos. Es un día muy especial porque pudieron darle continuidad a su actividad, superarse, cumplir horarios y, a través de esto, ser solidarios”.
Y continuó: “Estoy muy orgullosa y emocionada, es un gran logro para los chicos y esperamos poder seguir con esta actividad. Es un equipo que trabaja muy bien, los felicitos a ellos y sus profesores”.
En tanto, Hernán Rondán, Coordinador de la Casa de Día, contó: “Es una jornada de mucha alegría. Durante todo este tiempo, los chicos trabajaron con paciencia y entusiasmo y hacer la esta entrega es cumplir. Lo lindo es que se ocuparon de esto y no de estar en las esquinas haciendo otras cosas. Ser solidario también es parte de lo que ellos necesitan, descubrir que pueden ayudar al otro es terapéutico por eso esta acción de entregar materiales reciclados es tan valiosa”.
Luego explicó: “Dentro del área de adicciones del Municipio está la Casa de Día que aloja adolescentes. En 2012 asistían solo dos chicos, hoy contamos con alrededor de 70. Ellos están en tratamiento, rehabilitándose de distintas adicciones de a poco. Trabajamos con sus familias, los acompañamos, cuidamos y contenemos con amor, demostrando que nada es imposible”.
Por su parte, Karen, una de las chicas que concurre a la Casa de Día, explicó en qué consistió el arreglo y entrega de mobiliario: “Trajimos mesas y sillas para los chicos de la Escuela N°1 y con esto llegamos a completar un aula. Las llevamos destruidas y las devolvimos hermosas; le sacamos lo feo, sucio o las maderas rotas, las lijamos, pusimos maderas nuevas, remachamos, dimos dos manos de pintura y las entregamos”.
“Hice esto con mucho amor y ocupé tiempo en algo bueno y no en estar haciendo cosas malas. Nos estamos portando bien y los profesores ayudan mucho. Estoy muy orgullosa”, agregó.
Otro de los jóvenes, Nacho, reveló: “Nos ayuda a nosotros y a los alumnos que vienen a estudiar. Estas actividades nos fortalecen, servir es felicidad, antes no entendíamos ese mensaje pero ahora sí. La Casa de Día me ayuda y contiene”.
También Lucas dijo: “Nos hizo muy bien repararlas, poner nuestra energía y mente ahí y no en otro lado. Antes estaba en la calle haciendo desastres, los coordinadores y compañeros me ayudaron mucho”.
Por último, Aparicio completó: “Estamos viendo la posibilidad de aprobar, a través del Concejo Deliberante, la compra de la Casa de Día que hasta el momento alquilamos para poder agrandarla. Ya la pusimos en condiciones con móviles y equipos. El Municipio está presente y vemos los logros”.